Mariano Rajoy interviene en Santander en la clausura del XIII Congreso Nacional de la Empresa Familiar
TEXTO DE LA INTERVENCION:
Señoras y Señores, muy buenas tardes.
Quiero agradecerles que, una vez más, se hayan acordado de mí para compartir con ustedes esta jornada de trabajo. Sin tener ninguna empresa familiar creo que tengo algún derecho a considerarme uno más de este grupo; aunque sólo fuera ello por la cantidad de veces que he asistido a sus Congresos (recuerdo ahora los celebrados en Tenerife, Valencia, Palma de Mallorca, Madrid y el del pasado año en Zaragoza), la cercanía a muchas de sus ilusiones y la admiración por su trabajo. Lo he dicho ya otras veces: el emprendedor que desarrolla su tarea en una empresa fundada por él mismo o por sus antepasados, más cercanos o lejanos, posee una forma singular de afrontar el hecho empresarial. Puede no ser ni mejor ni peor que otras, pero es distinta. Y les confieso que me encuentro muy cómodo entre personas que vinculan su biografía, y la de los suyos, a la supervivencia y el desarrollo de sus empresas.