Partido Popular en Cantabria

TEXTO DE LA RUEDA DE PRENSA:

Como ustedes saben, el Plan Director del HUMV constituye uno de los asuntos de mayor trascendencia política, económica y social que como Comunidad Autónoma tenemos aún por resolver, y por ello, una constante siempre presente en la agenda política del Partido Popular.

Es absolutamente necesario mantener la actitud de reivindicación y exigencia frente a un Gobierno Nacional y Regional que en los últimos años no han hecho otra cosa que defraudar todos sus compromisos con Valdecilla.

Como es absolutamente obligado dar a conocer a los ciudadanos la verdadera situación del Plan Director del Hospital y las indeseables consecuencias que para Cantabria y para los cántabros tiene la ausencia de financiación por parte del Estado.

¿Y cuál es hoy esa situación?

En relación a los plazos para la ejecución y terminación de las obras del Plan Director, huelga decir que no se ha cumplido un solo plazo.

No se cumplió el de finales del año 2007 que fue el inicialmente comprometido por este Gobierno, como tampoco se cumplirá el de finales de 2010 anunciado públicamente y comprometido por el Gobierno en sede parlamentaria.

Es más, estoy convencida de que si el Consejero de Sanidad tuviera que responder con su cargo del cumplimiento de esa nueva fecha, nunca se hubiera embarcado en otra gran mentira que cualquiera puede percibir hoy; PORQUE la verdad es que la terminación del hospital está hoy MUCHO MÁS CERCA DEL AÑO 2012 QUE DEL AÑO 2010.

Y si además de la evidencia, se nos piden pruebas las hay. La Resolución del SCS publicada en el BOC del pasado 10 de febrero por la que se convoca el concurso para el contrato de seguimiento y control de las obras de la Fase III del hospital por un importe de 1.200.000 euros.

Un contrato de servicios por tres años- prorrogable- que revela TANTO la continua improvisación, la grave descoordinación y el auténtico descontrol que impera en la ejecución de una fase III hecha casi a remiendos, COMO la duración REAL de unas obras que se prolongarán como mínimo hasta el año 2012. Y 2012, son cinco años de retraso y más de diez años en obras.

En relación al sobrecoste en la ejecución del plan director y la firma del convenio de financiación íntegra por parte del Estado. Es más bien poco lo que se puede añadir.

Un sobrecoste que el Presidente del Gobierno en su última visita a Moncloa aseguró que superaría con mucho la cantidad de 100 millones de euros y que nadie- a pesar del estado avanzado de las negociaciones que se dicen mantener con el Gobierno Central- parece estar en condiciones de cuantificar, muy probablemente porque cada día que pasa este enorme agujero se hace mayor.

Y un convenio de financiación íntegra de firma siempre inminente pero que nunca llega.

Un convenio que a pesar de llevar años negociándose - no sabemos porqué cantidad ni con quien -, que a pesar de las reiteradas promesas incumplidas de los diversos ministros que han visitado Cantabria - la última la Sra. Ministra de Sanidad que comprensiblemente eludía visitar Valdecilla - y que a pesar de tan excepcionales interlocutores como tienen nuestro Presidente y Vicepresidenta Regional- me refiero a la Diputada socialista por Cantabria y Ministra de Economía Sra. Salgado- ha tropezado una y otra vez con el voto en contra de los socialistas en las Cortes Generales, con unos presupuestos generales del Estado que durante los tres últimos años no han consignado un sólo euro con destino a Valdecilla y con esa fatal alianza de Revilla y Zapatero en contra de los intereses de Cantabria.

Son ustedes testigos de las muchas veces que el Partido Popular ha alertado al Gobierno y a los cántabros de las consecuencias de esta cruda realidad. Unas dramáticas consecuencias que hoy ya no se pueden ocultar y que desvelaba en cifras, hace apenas una semana un medio de comunicación regional.

Unas cifras que nos permiten constatar QUE si las obras del Plan Director de Valdecilla no se han parado NO es gracias a las promesas incumplidas de Zapatero, que no pagan las facturas, NI tampoco gracias a la capacidad reivindicativa y de gestión del Gobierno de Cantabria, SINO al inmenso sacrificio de todos los cántabros que somos quienes "además de soportar una crisis económica propia" estamos soportando y estamos financiando la crisis añadida que nos generan los incumplimientos de Zapatero.

Porque somos los cántabros quienes hemos pagado ya los 32 millones de euros que el Gobierno Central no paga, y porque seremos los cántabros quienes continuemos pagando todo aquéllo que el Gobierno central nos debe- más de 100 millones de euros- y que desde Cantabria falta coraje y sobran hipotecas para exigir.

Una suma de casi 32 millones de euros que se viene detrayendo de un presupuesto sanitario que se resiente por falta de financiación, 32 millones de euros que hubieran evitado los sucesivos ajustes y recortes (en inversiones, en contrataciones de personal, en atención sanitaria en zonas rurales, en falta de pago a proveedores) que viene padeciendo nuestro sistema sanitario, 32 millones de euros con los que hubiéramos podido atender necesidades sanitarias de primer orden en Cantabria, como un abordaje integral de nuestras listas de espera o 32 millones de euros con los que hubiéramos podido cumplir compromisos perentorios de este Gobierno como la construcción de un Hospital en Castro Urdiales y los centros de salud aún pendientes tras no sé cuantos años, 32 millones de euros en definitiva, de inversión productiva generadora de actividad económica y de empleo y de inversión en salud y en calidad de vida, que es lo que Zapatero nos está arrebatando a los cántabros con la inestimable colaboración y perpetua sumisión de nuestro Gobierno Regional. Y 32 millones de euros que desde la fecha en que fueron calculados no han dejado de crecer; que cada día que pase sin firmarse el convenio y sin acompañarle de la necesaria financiación estatal no harán sino incrementarse y que mientras no se materialice ese convenio tampoco sabremos ni cómo y ni cuándo vamos a recuperar.

Este es el tremendo coste que para todos los cántabros tienen los sucesivos incumplimientos de Zapatero y de Revilla.

Un coste que los cántabros no podemos ni debemos asumir desde la normalidad, ni desde la resignación y que nos obliga a demandar un día si y otro también la firma de un convenio, que el día que llegue nadie podrá considerar un mérito.

Porque será, en el mejor de los casos, el cumplimiento forzoso y tardío de una obligación debida a Cantabria, o dicho de otro modo, la reparación de un agravio y de tres años de burla y abandono que causaron graves quebrantos a los cántabros.

Porque las obras de Valdecilla debían haber proseguido con cargo a la financiación del Estado, porque los cántabros nunca debimos tener que adelantar un solo euro si Zapatero hubiera cumplido su obligación y porque ningún Gobierno Regional medianamente normal lo hubiera consentido.

El Gobierno aseguraba a finales del año pasado que la firma del convenio tendría lugar en 2010. El PRC ha anunciado que se firmaría en la primera mitad y se nos ha avanzado por parte de la Ministra de Sanidad que está casi finalizado.

Si hoy, después de tantos engaños e incumplimientos albergamos cierta esperanza de que así sea, no lo es por la confianza que nos inspira el Gobierno Regional ni el Gobierno Zapatero, sino por la constante presión política ejercida por el Partido Popular, desde Cantabria y desde Madrid, que ha empezado a dar sus frutos.

Y me estoy refiriendo al mandato emanado de las Cortes Generales a finales de 2009 que, a iniciativa del Partido Popular y a pesar del voto en contra de los socialistas, obliga políticamente a Zapatero a financiar íntegramente nuestro Hospital.

Un hecho que marca un antes y un después, que obligará a la firma de un convenio que- salvo que el Sr. Zapatero se declare en rebeldía- no puede no firmarse y que seguiremos reivindicando hasta su materialización.

Y pensando precisamente en ese momento, nuestra responsabilidad y nuestra línea de actuación es clara. La de disponer de un perfecto y total conocimiento de la situación financiera del Plan Director exigiendo toda esa información que nadie en este Gobierno da a conocer voluntariamente, de la que no disponemos y que ya hemos solicitado porque es fundamental para trabajar desde el rigor, la transparencia y la defensa del interés regional en la futura firma del convenio en cuestión.

Mucho nos tememos que muy pocos de esos 237 millones de euros invertidos hasta la fecha en el hospital Valdecilla correspondan a la fase III, como mucho nos tememos que el desfase definitivo vaya a rebasar con mucho los 100 millones de euros.

Es por ello que hemos solicitado información escrita relativa a dicha fase III, como los reformados del proyecto, gastos varios, qué parte de la obra está pagada, qué parte pendiente de pago; así como todos los datos relativos a las fases anteriores fase I y fase II; es decir, toda la información necesaria para determinar cuanto hemos liquidado, cuanto queda pendiente de ejecutar y liquidar y a cuanto puede ascender el verdadero desfase presupuestario del Plan Director de Valdecilla.