Partido Popular en Cantabria

Primero la promesa. Prometedor: José Blanco, ministro socialista de Fomento. Lugar: Madrid, Pleno del Congreso de los Diputados. Fecha: miércoles, 24 de febrero de 2010. Prometió: "ratifico todos los compromisos que en materia de alta velocidad he contraído con las diferentes comunidades autónomas" (Congreso, Diario de Sesiones 2010, IX Legislatura, núm 143, página 12).

Eso significaba ratificar el compromiso con Cantabria de dos líneas de AVE, una con Bilbao y otra con la Meseta para 2015, expresado por Zapatero a Miguel Ángel Revilla tan recientemente como el pasado 22 de diciembre. Sin embargo, en el momento de pronunciar estas bonitas palabras, el señor Blanco ya había remitido al Presidente de Cantabria la carta en la que le conminaba a escoger entre el AVE de Bilbao o el de la Meseta.

Y ahora, la pistola. Aparentemente escandalizado ante este flagrante incumplimiento ministerial de una promesa-estrella del PRC y el PSOE, el señor Revilla, con la tamborrada habitual: "No aceptaremos que se nos ponga una pistola en el pecho y se nos diga ésta u otra: las dos".

Hay que recordar que, en una agria respuesta a las dudas expresadas por la Cámara de Comercio de Cantabria, el señor Revilla había dicho en diciembre de 2007 que no iba a consentir "que gente retrógrada pare esta ambición", aludiendo al AVE a Bilbao, que consideraba "irreversible".

Pues era perfectamente reversible. Y no sólo el de Bilbao, sino que incluso el de la Meseta, a la par que la carta del ministro a Revilla viajaba hasta Santander, veía paralizado el trámite de apertura de plicas para los tramos palentinos licitados (licitados 6 años después de la paralización por Zapatero en 2004 del AVE a Cantabria). Esa era la metafórica "pistola en el pecho" señalada por el Presidente: te paro el AVE de la Meseta para que elijas entre ese o el de Bilbao; para que no te hagas el listo demorando una respuesta mientras yo voy adjudicando tramos por Palencia y luego me digas que esa no es tu verdadera prioridad. Un verdadero ultimátum ministerial.

La "promesa", pues, fue respetar los dos AVE. La "pistola" fue parar los trámites del de la Meseta, y hacer pública en los periódicos la carta-ultimátum enviada a Revilla. Y ahora, como tercer y último paso, toca la "verdad".

Zapatero suprimió en 2004 el Plan Galicia que nos otorgaba un AVE Irún-Ferrol pasando por Santander; y anuló también el ya licitado proyecto Reinosa-Los Corrales del AVE Santander-Madrid. Ese fue el momento de la verdad. Revilla y el PRC aplaudieron y justificaron este abuso, tarea sonrojante en la que llevan ya casi siete años. Al cabo del tiempo, Revilla quiso disimular esta tremenda debacle con su propaganda sobre el "dos en uno": AVE a Madrid y a Bilbao, y Zapatero le jaleó mientras no hubo que tomar decisiones económicas de verdad y todo eran florituras y anchoas. Pero lo cierto es que no habrá AVE a Bilbao. Acaba de declararse oficialmente no prioritario, por tanto no tendrá ni un euro en muchísmo tiempo. Espero que al menos Revilla tenga la cortesía de pedir perdón por sus excesos verbales contra el Presidente de la Cámara de Comercio que dudó del AVE a Bilbao. Ese empresario cántabro tenía razón. Revilla, no, y encima recurrió a la descalificación del que opinaba diferente. Ni previsión, ni talante.

¿Qué pasa, entonces, con el AVE a Madrid? Si Revilla no hubiera permitido su paralización en 2004, hoy estaríamos muy cerca, como están Santiago, Oviedo y Bilbao, de contar con el AVE. Pero no es así, y ahora todo se remite a una futurible llegada a Cantabria "en torno a finales de 2015". Ni llegará entonces ni será un verdadero AVE, pero aun si concedemos el beneficio de la duda, ¿de qué sirve que llegue a Mataporquera el AVE cuando el 90% de la población de Cantabria vive en el litoral, y concretamente el 70% en el área metropolitana de Santander-Torrelavega? "Llegar a Cantabria" es una expresión burlona, hiriente y hasta zafia. Supone tomar por tontos a todos los cántabros y pensar que se les puede engañar como a niños. Donde tiene que llegar el AVE es a Santander, no a Pozazal.

Y esta es la verdad profunda o con mayúsculas, si el lector prefiere. Que a la coalición PRC-PSOE sólo le queda el engaño. Zapatero no les hace los AVE prometidos. No les da los 200 millones de euros prometidos para la Autovía del Agua. No le da los 100 millones de euros para las obras de Valdecilla. No termina la Autovía Solares-Torrelavega ni Aguilar-Burgos. Ni hace La Remonta ni las Estaciones de Santander ni la Autovía Dos Mares.

La verdad superficial y con minúsculas la dijo con llaneza el Presidente de Cantabria al hilo de estos días: que de ninguna manera se iba a romper la coalición de gobierno PRC-PSOE. Naturalmente que no: ¡la única promesa que tiene que cumplir el PSOE en Cantabria es mantener a Revilla! Lo demás no tiene ninguna importancia para ellos. Tomen los ciudadanos y ciudadanas buena nota para las elecciones autonómicas del año que viene y procuren elegir un Gobierno regional que no esté en manos de Zapatero. No hay otra solución y ya saben cuál es.

Tribuna de opinión publicada el 7 de marzo de 2010 en El Diario Montañés