Para el portavoz parlamentario del PP, el futuro de la comunidad autónoma "depende de las tres Administraciones que la gestionan", por ello Cantabria "debe tener como una prioridad lograr la coordinación y la cooperación entre todas ellas con el fin de obtener el máximo provecho y rendimiento a su gestión".
En su opinión, el presidente del Gobierno regional "debe ser el catalizador de las diferentes actuaciones, desarrollando un papel principal en el liderazgo, la defensa y la reivindicando en función de los diferentes niveles en que se lleven a cabo las distintas iniciativas en nuestra comunidad".
Sin embargo, Francisco Rodríguez opina que "no existe un liderazgo" que dé lugar a una coordinación. "Dentro del propio gobierno nos encontramos dos gobiernos y en muchísimos de los casos no sólo nos encontramos dos gobiernos, sino que los propios consejeros realizan actuaciones personalizadas y nunca coordinadas desde la Presidencia".
"El Gobierno de Cantabria -- continuó -- ha dejado de ser el punto de encuentro entre las Administraciones, ya que ante la Administración nacional actúa con sumisión, mientras que ante los Ayuntamientos actúa con prepotencia y sectarismo y en la propia gestión del Gobierno no existe ni coordinación ni gestión adecuada en función de las prioridades".
Como ejemplo de ello, Francisco Rodríguez se refirió a que esas prioridades de Cantabria "siguen siendo las mismas de la primera reunión que mantuvieron Zapatero y Revilla hace ya más de una legislatura".
Por lo que se refiere a los Ayuntamientos, Rodríguez puso de manifiesto que el Gobierno regional no exige al central que "se apruebe una financiación local". "Hoy poco se sabe de la financiación autonómica y nada de la financiación local", subrayó.
Pero además, para el portavoz parlamentario del PP, el Gobierno regional "hace una dejación fundamental, como es la firma del pacto local en Cantabria". Al respecto recordó que en el año 2003 había un proyecto de ley pactado con la Federación de Municipios de Cantabria. "A día de hoy ni existe proyecto ni acuerdo, sino abandono total del pacto local que se corresponde con la segunda descentralización".
También consideró por otra parte que "el Gobierno regional discrimina a los cántabros en función de los ayuntamientos en los que viven y fundamentalmente en función del color político del partido que gobierna en esos ayuntamientos".
"El Gobierno de Cantabria con los ayuntamientos no está haciendo región, no está haciendo comunidad y lo que está haciendo es partidismo", aseveró Francisco Rodríguez quien añadió que el Ejecutivo "está actuando con una visión alicorta y cortoplacista, lo que está siendo nefasto para el futuro de los cántabros y de nuestra comunidad autónoma".
Para Francisco Rodríguez, "en Cantabria hoy no son prioritarias nuevas competencias, en Cantabria hoy es prioritario un nuevo Gobierno para gestionar adecuadamente las competencias que tiene nuestra comunidad autónoma y gestionar adecuadamente la coordinación entre las distintas Administraciones que desarrollan su gestión en Cantabria".