Partido Popular en Cantabria

El senador autonómico por Cantabria y portavoz de Asuntos Iberoamericanos del PP en el Senado, Íñigo Fernández, advitió hoy que “Venezuela es el mayor agujero negro para el Gobierno de Sánchez, porque su relación está llena de sombras, llena de dudas y de una absoluta falta de explicaciones”, señaló durante la defensa de una moción del Grupo Popular para reclamar “limpieza democrática” en los procesos electorales en Hispanoamérica.

“El problema de Venezuela con el Partido Socialista es que llueve sobre mojado. Hay muchas cosas que tapar, muchas relaciones, que han surgido a lo largo de los años de apoyo a aquel régimen, que no se han explicado”, afirmó Fernández.

El parlamentario cántabro puso el foco en que “todavía” no tenemos una explicación de qué hacía en las pistas de Barajas el ministro José Luis Ábalos “con una señora del régimen de Venezuela que tenía prohibida su entrada en Europa, ni qué contenían las maletas que intercambiaron; ni explican qué papel juega el expresidente Zapatero” en el apoyo al régimen de Maduro.

Sobre Venezuela, resaltó que en la comparecencia de la líder opositora María Corina Machado “quedó claro que es uno de los lugares en que hay irregularidades de todo tipo: Es el Gobierno de Maduro el que decide quién se presenta a unas elecciones y quien no y también quién vota y quien no”.

La moción del PP, aprobada por una amplia mayoría, reclama al Gobierno de Sánchez que defienda la limpieza democrática y respeto a los derechos de los ciudadanos en los procesos electorales a celebrar en hasta seis naciones de Hispanoamérica en 2024.

La iniciativa también insta al Ejecutivo a “actuar con cautela en sus actividades con los gobiernos que no cumplen los requisitos mínimos para recibir la definición de democráticos”.

En este sentido, Iñigo Fernández afirmó que “hablamos de procesos muy diferentes” y aseguró que “hay lugares en los que la democracia es una farsa y no se vota en libertad”.

El dirigente popular concluyó destacando que “España es un modelo para muchas regiones Iberoamericanas, como también lo fue nuestra Transición democrática”. Ante ello, reclama ser “dignos de ser observados” y advierte a los senadores socialistas que “no se están comportando como tal” por sus críticas y censuras “a que expresemos libremente nuestra opinión política, incluso en esta Comisión”.

EL ESPAÑOL EN LA CORTE INTERNACIONAL DE JUSTICIA

Por su parte, el también senador por Cantabria, Severiano Cuesta, defendió una moción del PP, aprobada por una amplia mayoría, por la que se respalda la iniciativa internacional para reconocer el español como idioma oficial y de trabajo de la Corte Internacional de Justicia, instando al Gobierno a liderar este proceso en el ámbito internacional.

El senador del PP recordó que la Corte Internacional de Justicia sólo tiene como idiomas oficiales el inglés y el francés, mientras que Naciones Unidas también incluye el español, árabe, chino y ruso.

En este sentido, aseguró que “es absurdo que en pleno siglo XXI los países hispanohablantes tengan que resolver sus conflictos en un idioma que no es el suyo, cuando la tercera parte de los conflictos que se resuelven en este Tribunal son entre estos Estados”.

Cuesta resaltó que el español, según datos del Instituto Cervantes de 2023, “tiene 500 millones de hablantes nativos, cifra que se eleva a 600 si sumamos a quienes la tienen como segunda lengua”. Además, “es el tercer idioma más utilizado en Internet, sólo superado por el inglés y el chino; y el segundo en redes sociales como Facebook y X”.

Por último, el senador popular subrayó que “es obligación de todos defender la importancia nuestra lengua en el mundo para colocarla en el lugar que se merece y corresponde”.

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