El Partido Popular ha pedido rigor y certezas sobre la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Vuelta Ostrera tras la adjudicación de un nuevo informe requerido por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC).
Se trata de un nuevo informe adicional a la adenda al estudio de impacto ambiental de las alternativas planteadas por la sustitución de estación depuradora por importe de 115.452,37 euros, licitado el pasado 13 de marzo de 2020 por la CHC, que ha sido adjudicado el 21 de agosto a la empresa SAITEC, S.A.
El diputado nacional Diego Movellán ha recordado que los cántabros llevan meses esperando conocer cuál será la nueva ubicación de la EDAR de Vuelta Ostrera y considera inadmisible que se sigan sin aportar certezas a los cántabros.
“Llevamos años esperando para saber dónde se colocará esta importante infraestructura para toda la comarca”, ha dicho. Para Movellán es vergonzoso que la sociedad cántabra siga sin saber dónde se ubicará finalmente y qué plazos se barajan para la nueva instalación, mientras sí que se está elaborando el proyecto de demolición de la existente. “Sabemos que la demolición está en marcha, pero no sabemos ni donde se va a ubicar la estación alternativa ni tenemos proyecto”, ha lamentado.
Por su parte, la diputada nacional Elena Castillo, ha apelado al necesario rigor que se debe tener en el estudio de impacto ambiental y sus conclusiones.
Los populares advierten que la nueva ubicación de EDAR de Vuelta Ostrera puede tener un enorme impacto en el municipio donde finalmente se ubique y consideran positivo que se pidan informes complementarios a la adenda del EsIA, pero también consideran fundamental que socialistas y regionalistas no jueguen con los cántabros y que no busquen soluciones electoralistas. “Ni el PSOE, nacional y autonómico, ni el PRC se mojan en ningún problema de carácter medioambiental y siempre evitan el coste electoral”.
“Necesitamos la mejora alternativa ambiental y económica, la mejora solución para nuestra tierra”, concluyen los diputados.
La depuradora de Vuelta Ostrera debe ser derribada
La Estación Depuradora de Aguas Residuales de Vuelta Ostrera (EDAR de Vuelta Ostrera) se remonta al año 1999, año en el que se publica en el BOE el anuncio del concurso para la redacción de proyecto y la ejecución de la EDAR de Vuelta Ostrera.
En agosto del año 2000 se produce una denuncia de la asociación ARCA y, al haber surgido problemas con los diques de contención de la ría, la Demarcación de Costas insta la paralización de las obras en tanto se comprueben los extremos de la denuncia.
Tras sendos informes de la Dirección General de Costas, del Pleno del Ayuntamiento de Suances y de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno de Cantabria, el Consejo de Ministros en su sesión del 27 de abril del año 2001, acuerda declararlo como zona de reserva a los efectos de lo previsto en el Art. 47 de la Ley de Costas, una parcela de terreno de dominio público marítimo-terrestre, con una superficie de 87.450 m2, para ser ocupada por la depuradora. Ante dicho acuerdo, ARCA interpone recurso contencioso-administrativo solicitando la anulación y demolición de lo ilegalmente construido.
Ejecutadas las obras en su totalidad en el año 2004, el Tribunal Supremo dictó sentencia el 26 de octubre de 2005 anulando el acuerdo de Consejo de Ministros por el que se reservaba una parcela de terreno de dominio público marítimo-terrestre, con una superficie de 87.450 m2, para ser ocupada por la depuradora y ordenando la demolición de la EDAR construida.
Desde el año de sentencia de demolición hasta la actualidad han transcurrido 16 años de los cuales 6 correspondieron a la etapa de gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, etapa en la que no se dio ningún paso para solucionar el problema que planteaba la sentencia de demolición.
En septiembre de 2011 se adjudica a la empresa FULCRUM el estudio para analizar las distintas alternativas de ubicación de la nueva EDAR de Vuelta Ostrera y en junio de 2015 se somete a consultas previas el “Estudio de Alternativas para la sustitución de la existente EDAR Vuelta Ostrera”, presentándose el 12 de diciembre de 2017 el documento técnico y sometiéndolo a información pública el 4 de enero de 2018.
Desde entonces hasta ahora, 334 alegaciones y una adenda a la EsIA, que inicialmente no establecía claramente ninguna alternativa más ventajosa desde el punto de vista ambiental respecto a las demás, pero que finalmente apuntaba hacia la Isla de Solvay.
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