El Partido Popular de Cantabria ha mostrado hoy su apoyo institucional y político a los alcaldes de la comarca del Saja en las reivindicaciones y actuaciones que están realizando tanto ante el Gobierno de Cantabria como ante la Confederación Hidrográfica del Cantábrico para evitar que en un futuro se vuelvan a producir inundaciones como las que se sufrió esta zona el pasado mes de enero.
La diputada regional Isabel Urrutia ha destacado que los alcaldes de la zona se han tenido que unir para que alguien les escuche y atienda sus peticiones. “En esto no hay colores políticos, no hay rivales, sino que hay, como han demostrado los ediles, una unión para buscar el mismo fin, evitar que sus vecinos vivan otra vez una tragedia como la que se produjo en 62 de los 102 municipios de Cantabria”.
Urrutia ha dicho que la situación vivida en Cantabria tras el desbordamiento de prácticamente todos los ríos a comienzos de año fue catastrófica y que, aunque no se registraron víctimas mortales o daños personales directos, las precipitaciones dejaron tras de sí cuantiosos daños materiales en bienes particulares, viviendas, fábricas, fallos del suministro eléctrico y desperfectos de gran envergadura en infraestructuras viarias y ferroviarias.
“¿No se acuerda ya nadie del aislamiento de más de dos meses que padecieron los vecinos del Valle de Cabuérniga por el argayo en Ruente?”, ha preguntado Urrutia, quien considera lamentable que la Confederación Hidrográfica se escude en la falta de recursos económicos para invertir en anticipación, prevención y seguridad, que son los principios básicos para evitar cualquier tipo de catástrofe.
La parlamentaria del PP afirma que “es mejor prevenir que lamentar, porque además siempre va a ser mucho más caro el remedio que buscar una solución previa”. “No se pueden amparar en que luego se damnifican los daños, porque además de ser una política totalmente contraria a los principios básicos de seguridad ciudadana es una falacia, y en Cantabria lo hemos sufrido”, ha apostillado.
LOS SOCIALISTAS, NOCIVOS PARA CANTABRIA
Tras conocerse que el Ejecutivo de Pedro Sánchez va a repartir 746 millones en ayudas por riadas e inundaciones y ha dejado fuera a Cantabria, que se vio afectada por esos mismos fenómenos durante el pasado mes de enero, la diputada popular ha acusado a los socialistas de ser “nocivos para Cantabria” y de no ocuparse de nuestra comunidad autónoma cuando gobiernan en España.
Según ha señalado, resulta evidente que Cantabria no cuenta para los socialistas, que deben pensar que esta región no merece ser tratada en justicia ni tiene para ellos el mismo valor que otras comunidades autónomas.
Para la parlamentaria regional del PP, ahora nos dejan fuera de las ayudas por las riadas, pero antes nos dejaron sin poder captar agua del pantano del Ebro cuando se necesitó y las infraestructuras proyectadas están paralizadas desde que Pedro Sánchez accedió al Gobierno tras la moción de censura a Mariano Rajoy.
En opinión de Isabel Urrutia, resulta más que evidente que un Gobierno socialista en España es sinónimo de abandono y falta de apoyo a la región.
Finalmente, Urrutia ha manifestado el apoyo que desde el Partido Popular harán, además de a los alcaldes, al Gobierno de Cantabria “para que reivindique lo que es nuestro”, aunque -ha añadido- “nos hubiera gustado que el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, se acordara durante estos diez meses de lo que le pertenecía a Cantabria y de que nuestra tierra necesita ayudas como consecuencia de los temporales de enero”.
Y recuerda que el Partido Popular, a través de sus diputados nacionales, Diego Movellán y Ana Madrazo, presentó el pasado mes de febrero una iniciativa en el Congreso de los Diputados, concretamente una proposición no de ley en la Comisión de Interior, en la que se pedía al Gobierno de la Nación que declarara Cantabria como zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil y aprobara las ayudas necesarias por los daños sufridos tanto por particulares como ayuntamientos. Esta iniciativa decayó por la convocatoria de elecciones para el 28 de abril.
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