Cantabria necesita completar su red hospitalaria y de centros de atención primaria para el aumento de nuestros niveles de autosuficiencia y para lograr una mayor cohesión social.
Estamos, sin duda, ante uno de los fracasos más estrepitosos de este Gobierno. Tan estrepitoso que no le ha quedado otro remedio que reconocerlo. Mientras el resto de Comunidades Autónomas españolas han realizado a lo largo de esta legislatura un enorme esfuerzo en modernización e impulso de sus infraestructuras y en la mejora y satisfacción de sus recursos humanos, en Cantabria ni lo uno ni lo otro.
El Gobierno socialista- regionalista tan solo ha sido capaz de finalizar e inaugurar esas obras e inversiones que fueron proyectadas, presupuestadas y ejecutadas por el anterior Gobierno del Partido Popular. Ni una sola más. Han sido incapaces de ejecutar una sola de las infraestructuras sanitarias comprometidas.
Por eso la conclusión es clara: Cantabria ha perdido cuatro años, también en infraestructuras sanitarias y, por lo tanto, en calidad asistencial. Cuatro años de retroceso y pérdida de competitividad que es imprescindible y urgente recuperar con un GRAN IMPULSO a nuestras infraestructuras y equipamientos sanitarios.
Por ello y para ello impulsaremos un ambicioso programa de inversiones en infraestructura sanitaria con el objetivo de la ampliación y modernización de nuestra red de hospitales, centros de salud y consultorios rurales.
Comprometemos la imprescindible y ansiada finalización del Plan Director del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, cada vez más incierta y más lejana en el tiempo (hoy hay que hablar en el mejor de los casos de finales del 2.011) y paradigma de la incapacidad del actual Gobierno.
Continuaremos con los proyectos de ampliación y mejora de los Hospitales de Sierrallan y Laredo fruto del Gobierno del PP. Aunque a otros les haya correspondido inaugurarlos a bombo y platillo, fue el BOC de abril de 2003 el que publicaba el concurso para la redacción del proyecto de obras de ambos hospitales. Si en cuatro años el actual Gobierno ha sido incapaz de concursar los cuatro centros de salud prometidos imaginen la suerte que hubieran corrido estos proyectos en manos de los socialistas-regionalistas...)
Haremos realidad (y no burla) el Hospital Público Comarcal que a Campoo corresponde en derecho. Ese hospital que debía estar en funcionamiento y prestando asistencia sanitaria digna y de calidad a toda la comarca desde finales de 2004 y que este Gobierno paralizó nada más llegar para tratar de imponer un ambulatorio fantasma ( que se anuncia, se promete y se jura pero nunca aparece) .
Nuestro planteamiento sigue siendo el que fue: un hospital concebido funcionalmente como un hospital general, con todos los servicios propios de un hospital general. El del actual Gobierno nos le imaginamos después de cuatro años sin poner una piedra y ocultando la cartera de servicios del centro.
Construiremos un Hospital en Castro Urdiales. Un hospital del siglo XXI que vendrá a resolver los problemas de atención especializada del municipio con más potencial de crecimiento de la región, del Área de Salud de Laredo y a completar la red de hospitales públicos de nuestra CCAA.
Nos comprometemos igualmente a la remodelación integral del Centro de Rehabilitación Psiquiátrica de Parayas. Llevar a cabo su transformación, para su conversión en un ?Complejo Hospitalario para la atención integral de las enfermedades psiquiátricas? es una deuda pendiente y de justicia con los enfermos mentales y sus familiares- profundamente maltratados por este Gobierno- que saldará el próximo Gobierno del PP.
Construiremos los centros del Salud del Alisal, Tanos- Cartes, Cotolino II en Castro Urdiales, Camargo, Nueva Montaña, Santa Cruz de Bezana, etc.... que llevan cuatro año durmiendo el sueño de los justos.
Y, por supuesto, mejoraremos y ampliaremos la red de consultorios rurales en pequeños núcleos.
Una medida importante e instrumental de cuanto les acabo de exponer es la modificación del mapa sanitario de Cantabria. Una medida planificadora que nos va a permitir adaptar la zonificación sanitaria, tanto en atención primaria como especializada, a los cambios demográficos producidos en nuestra CCAA, a las demandas y accesibilidad de la población y a la libertad de elección del ciudadano.
Junto a estas grandes inversiones, cabe destacar una serie de actuaciones que permitirán el despliegue territorial de las especialidades médicas hoy no existentes en las distintas áreas de salud de la CCAA.
Porque queremos, podemos y debemos dar lo que nuestros ciudadanos nos demandan: más proximidad y cercanía, recursos suficientes y servicios más adecuados a las necesidades de la población y, en definitiva, una mejora de la calidad asistencial.
Así se pondrán en marcha nuevos servicios como son: Una unidad de partos, neonatología y cirugía infantil en el Hospital de Sierrallana. Una unidad de ingreso hospitalario para potenciar la atención psiquiátrica en el Hospital de Laredo. La creación de Unidades de Atención Geriátrica en nuestros Hospitales.
A estas propuestas se suman otras de gran importancia en cantidad y calidad como son, la de aumentar la capacidad de resolución de la atención primaria y su acceso a medios diagnósticos (endoscopias, ecografías, TAC movil, y descentralización de anticoagulantes orales....etc).
Fomentar la utilización de las innovaciones tecnológicas en la red sanitaria ampliando las aplicaciones de la teleconsulta y telemedicina. (ejemplo de tele- radiología en Potes / equipamiento de Gobierno PP).
Y avanzar decididamente en la mejora de la atención urgente y del transporte asistido, mejorando los tiempos de traslado y atención de pacientes en situaciones de urgencia, sin olvidar tampoco las soluciones a los desplazamientos por motivos sanitarios desde el mundo rural.
Hay muchas más, pero las que les he contado dibujan un modelo sanitario clarísimo. Un modelo en el que el ciudadano es el centro y que, por lo tanto, apuesta por la humanización de los recursos sanitarios y por la adaptación del sistema a las necesidades sentidas por los ciudadanos. Un modelo que aspira a la excelencia en calidad. Y un modelo que apuesta por el sistema sanitario público como un factor de cohesión social.
Partido Popular en Cantabria
