La diputada regional y portavoz de Sanidad del Partido Popular, María José Sáenz de Buruaga, ha mostrado su preocupación y su “estupor” tras la intervención de la consejera de Sanidad ante la Comisión de Economía para presentar los presupuestos de su departamento para 2017. “Siendo preocupante que la consejera no haya sabido defender el presupuesto que la sanidad cántabra necesita, lo es mucho más el grave quebranto que va a suponer para la situación financiera de la comunidad autónoma”, ha dicho.
Según explica Sáenz de Buruaga, el hecho de que esté basado en ingresos irreales va a agravar el imparable aumento del gasto que han generado la ineficiencia y el descontrol en la gestión. “El presupuesto de 2016 ha resultado insuficiente para soportar el gasto real del año en la escalofriante suma de 120 millones de euros, con lo que el presupuesto de 2017, de por sí insuficiente, nacerá gravemente lastrado por la deuda, agotándose en sus principales partidas de gasto en el mes de julio”.
A juicio de la diputada regional estamos ante un presupuesto que socava gravemente la suficiencia financiera del sistema sanitario público. “Nos conducen directamente al agujero de la quiebra del que, hace bien poco, rescatamos con éxito a nuestra sanidad”, ha sentenciado.
Para la exconsejera de Sanidad del Gobierno del PP, no hay más que ver la evolución del capítulo destinado a suministros hospitalarios. Si el año 2015 se cerró con 37 millones de déficit que se imputaron al presupuesto de 2016, este último se agotó en septiembre, y se ha cerrado el año con facturas en los cajones que no se han podido imputar al presupuesto por falta de crédito, por importe cercano a los 70 millones de euros. “Como han abandonado el hábito del Partido Popular de cerrar el año poniendo el contador de la deuda a cero, el presupuesto de 2017 tendrá que financiar la deuda acumulada y se agotará en el mes de julio”, ha dicho.
Entrando más al detalle del presupuesto, llama la atención el desequilibrio en el capítulo destinado a la factura farmacéutica vía receta, donde se prevé un “ridículo” incremento del 0,5% cuando el gasto farmacéutico crece en Cantabria a un ritmo del 5%, uno de los mayores del país. A lo que se añade, tal y como explica Sáenz de Buruaga, que a día de hoy están pendientes de pago la factura de los meses de septiembre, octubre, noviembre y un resto de agosto de 2016.
Sin contar la factura de diciembre, el Servicio Cántabro de Salud debe al Colegio Oficial de Farmacéuticos, a día de hoy, más de 35 millones de euros. “Pues bien, con el importe consignado en este presupuesto, no se podrá pagar más que hasta el mes de julio y no creo que completo. Una irresponsabilidad absoluta que no viene sino a poner en riesgo la adecuada prestación farmacéutica de la población”, advierte la portavoz de Sanidad del PP.
En cuanto a Recursos Humanos del Servicio Cántabro de Salud, “el presupuesto experimenta un incremento del 1,36%, o lo que es lo mismo 5,2 millones de euros, y que curiosamente pierde 1 millón de euros tras el acuerdo con Ciudadanos que exigía abordar un incremento de plantilla para la aprobación del presupuesto”, ha agregado.
Para Sáenz de Buruaga estamos ante una absoluta “tomadura de pelo”, ya que, según recuerda, “llevamos todo el año escuchando de nuestros responsables sanitarios que la imposibilidad de sustituir, contratar o mantener abiertos nuestros centros no era imputable a la falta de presupuesto sino a la carencia de profesionales, y de la noche a la mañana nos confiesan que Sanidad dispondrá de 5 millones más para cubrir mejor las bajas y vacantes médicas”.
El de 2017 repite, cuando no aumenta, las carencias del presupuesto de 2016, que ha resultado insuficiente para pagar la nómina de diciembre en 8 millones de euros, “y no por culpa de la extra de 2012 que, en el caso de Sanidad, la ha pagado el capítulo 2, sino porque el presupuesto era ficticio e insuficiente”. “Sin hacer absolutamente nada más que en 2016 y tan solo aplicando el incremento del 1% de los sueldos, al nuevo presupuesto le faltan en este capítulo 7 millones de euros como mínimo”, concluyó.