“Más empleo, más bienestar y más garantías de buen gobierno. Este es el programa del PP para culminar el cambio en Cantabria”. Con esas palabras resumió sus objetivos políticos para la próxima legislatura el presidente regional y candidato del PP, Ignacio Diego, durante el acto de presentación de su programa de gobierno para los próximos cuatro años.
Más empleo. Durante el periodo 2007-2011, en Cantabria perdieron su puesto de trabajo 27.000 personas. En el primer año de la actual legislatura, la destrucción de empleo continuó, como consecuencia de la virulencia de la crisis que veníamos arrastrando. Ese proceso se detuvo en 2013, periodo en el que las listas del paro se incrementaron tan sólo en 600 personas. Y, por fin, la situación se dio vuelta en 2014, cuando el paro se redujo en 6.500 personas. Los primeros meses de 2015 no sólo confirman la nueva tendencia, sino que Cantabria es, en porcentaje a su población, la región de España que más empleo crea. Hoy, en Cantabria hay menos parados que hace un mes, menos parados que hace un año y menos parados que hace cuatro años. Respecto al 1 de mayo de 2011, último dato conocido antes de las elecciones, hay 726 parados menos. Y, lo que es más importante, la tendencia ha cambiado: en 2011 el paro aumentaba y ahora se reduce. Por eso es fiable el presidente Ignacio Diego cuando promete más empleo como uno de sus objetivos principales de gobierno.
Más bienestar. Los servicios públicos quedaron abandonados en la última etapa del gobierno PRC-PSOE y la crisis económica constituía una amenaza sobrevenida sobre ellos. Pero el gobierno del PP no sólo los ha rescatado, sino que los ha hecho viables y solventes. Hay algunos hechos que lo demuestran: la conclusión de las obras del Hospital Marqués de Valdecilla, la implantación de la enseñanza bilingüe en los colegios, para que los niños de Cantabria puedan aprender Inglés desde edad bien temprana; la reducción de la tasa de abandono escolar por debajo del 10%; la implantación de la FP Dual para que los jóvenes de Cantabria puedan aprender sus oficios en las propias empresas... Un informe difundido por el servicio de estudios del BBVA indica que Cantabria es la cuarta región de España que mayor esfuerzo ha hecho en los últimos años para atender las necesidades de su Sanidad, su Educación y sus políticas sociales. Y el esfuerzo será mayor a medida que la durísima crisis económica de los últimos años vaya quedando atrás. Por eso el presidente Ignacio Diego tiene credibilidad cuando promete más bienestar en sus próximos cuatro años de gobierno.
Más garantías de buen gobierno. En los últimos años se ha hecho un esfuerzo imponente para poner fin al despilfarro existente con el gobierno anterior. Ahí están algunos datos conocidos recientemente, como que Revilla y sus consejeros se gastaron 1,6 millones de euros en comidas de todo tipo durante el periodo 2007-2011, mientras que en el periodo 2011-2015 ese gasto apenas ha superado los 200.000 euros. O el coste de los viajes a Madrid. Cada desplazamiento a Madrid de Ignacio Diego ha costado una media de 340 euros. Cada vez que Revilla visitaba a Zapatero, a los cántabros les costaba una media de 1.540 euros, sin contar los 320.000 euros que se gastó en latas de anchoas para regalar. Es sólo una muestra, pero muy representativa de cómo han gastado el dinero unos y cómo lo gastaron otros. El buen gobierno es gestionar con rigor el dinero de los cántabros y reducir los impuestos que pagan para mantener en pie la administración. El gobierno del PP suprimió el 1 de enero de 2012 el Impuesto de Sucesiones y está decidido a no reimponerlo, como proponen el PRC, el PSOE y Podemos. No se le pueden pedir más sacrificios al contribuyente. Y mucho menos para gastarlo en viajes, en anchoas, en altos cargos, en el Racing, en puertos deportivos vacíos o en aeródromos que nunca llegaron a funcionar, porque nadie se tomó la molestia de enterarse de que a sólo unos metros se iba a instalar un parque eólico que impediría el despegue y el aterrizaje de las avionetas. Con Ignacio Diego esas cosas no pasan. Por eso tiene toda la credibilidad para prometer más garantías de buen gobierno.
El cambio en Cantabria ha comenzado y se ve, pero sus efectos más favorables están por llegar. Por eso es preciso completarlo: para seguir creciendo y creando empleo, para que el tren de la recuperación no descarrile, para no volver a las andadas... para todo eso ha pedido el apoyo a los cántabros Ignacio Diego el próximo 24 de mayo.
Tribuna de opinión publicada el 8 de mayo de 2015 en el Diario Alerta