Partido Popular en Cantabria

No se puede negar que las últimas apariciones televisivas de Miguel Ángel Revilla han tenido su éxito. Ciudadanos de todos los rincones de España le ven por televisión, le escuchan y hasta comparten algunas de sus opiniones acerca de los temas más diversos. Algunos de quienes le escuchan desde Burgos, desde Murcia, desde Orense... asienten, se sorprenden o sonríen con las palabras de quien fuera presidente del Gobierno de Cantabria, y hasta se preguntan por qué no siguió en el cargo tras las elecciones del 22 de mayo de 2011. Una buena pregunta: ¿Por qué no siguió en el cargo tras las elecciones? Pues porque, a diferencia de lo que les ocurre a los de Burgos, a los de Murcia y a los de Orense, los cántabros padecieron su gestión durante ocho años y, llegado el momento, decidieron prescindir del personaje. Por eso no siguió en el cargo tras las elecciones: porque los cántabros conocen muy bien a Miguel Ángel Revilla. A los cántabros, las apariciones televisivas de Miguel Ángel Revilla no les hacen tanta gracia. Probablemente, no les hacen ninguna gracia.

Porque indigna verle llorar en televisión aquejado de una enorme pena por lo que están pasando los afectados por las 'preferentes', cuando todos saben que en Cantabria las participaciones preferentes en las cajas de ahorros se comercializaron durante su mandato, y no hizo nada por evitar aquella estafa, y ni siquiera fue capaz de recibir a los afectados. Y porque saben que, aunque ahora se lamente por la situación de los parados y secunde las huelgas generales convocadas por los sindicatos, cuando ejercía como presidente del Gobierno de Cantabria a Miguel Ángel Revilla no le preocupaba en absoluto la situación de los parados, y decía que muchos de ellos eran unos vagos y que, en lugar de dedicarse a buscar trabajo, preferían emplear su tiempo en jugar a las cartas o al bingo. Eso hacía y eso decía Miguel Ángel Revilla hace no mucho tiempo. Sí. Existen notables contradicciones entre lo que dice en sus apariciones televisivas y lo que decía o hacía cuando era el presidente del Gobierno de Cantabria.

Pero sus contradicciones no se reducen a eso. Ahora mismo, todavía, dice unas cosas en Madrid y dice o hace todo lo contrario en Cantabria.

Un buen ejemplo es lo que ha sucedido en la comisión parlamentaria que investiga la gestión en la empresa pública CANTUR. Al ser preguntado por su grado de conocimiento de la operación de venta de las acciones del Racing al empresario indio Ahsan AlÍ Syed, Miguel Ángel Revilla negó toda participación, remitió toda la responsabilidad a sus consejeros Ángel Agudo y Javier López Marcano, aseguró no conocer nada de la operación y terminó por negarse a contestar a las preguntas de los parlamentarios, permaneciendo callado como un muñeco. ¿Cuándo conoció la existencia de Alí Syed y cuándo supo de su interés por hacerse con la propiedad del Racing? Dijo que unos días antes, aunque su consejero de Economía y Hacienda reconoció llevar mes y medio negociando con el empresario indio. Increíble. ¿Por qué permitió una quita de 1,2 millones de euros en la deuda que Alí Syed debía asumir con Cantur? Él no sabía nada, aseguró. Todo era responsabilidad de Ángel Agudo y Javier López Marcano. ¿Por qué se acordó cancelar la prenda sobre las acciones, esto es, renunciar a las garantías de cobro?. Él no sabía nada, afirmó. ¿Por qué una operación de siete millones de euros se soportó con un único aval por importe de millón y medio de euros? Él lo desconocía. ¿Por qué los informes de solvencia se solicitaron a nombre de una empresa llamada WGA, con sede en Bahrein, cuando la operación habría de formalizarse con otra llamada WGA Sport, con sede en Amsterdam? Él no sabía nada, parece ser. Nada. No sabía nada.

Pero se permite criticar duramente al presidente de la Junta de Andalucía, el socialista José Antonio Griñán, en relación con el fraude de los ERE cometido en aquella comunidad autónoma. Dice Revilla: "Lo del ERE de Andalucía es otro escándalo mayúsculo. Ahí habrá que pensar... Hombre... si un presidente no se ha enterado, lo cual me parece muy grave si no se entera. Hombre... Una de dos. Si no se entera no es muy capaz. Y si se ha enterado entonces, ya, es un delincuente".

Esto dice Revilla en televisión, pero en el Parlamento de Cantabria se calla como un muñeco y asegura que no sabía nada de Alí Syed, ni de la 'quita' de 1,2 millones en la deuda que asumía con Cantur, ni de la cancelación de la prensa sobre las acciones, ni de los avales, ni los informes solvencia. Nada. No sabía nada.

Este es Miguel Ángel Revilla: el que dice ahora lo contrario de lo que hacía como presidente; el que acusa a Griñán por hacer en Andalucía lo mismo que él hacía en Cantabria, el que juzga a un político por no enterarse de las cosas que hacía su Gobierno, al tiempo que asegura que nunca supo lo que sucedió en la operación de venta de las acciones del Racing.

Dos vídeos colgados en 'youtube', titulados 'Este es Revilla' y 'Este es Revilla 2', demuestran quién es el personaje y por qué los cántabros decidieron enviarle a la oposición cuando fueron consultados en las elecciones del 22 de mayo de 2011. Porque, a diferencia de los de Burgos, los de Murcia y los de Orense, los cántabros le conocen bien. Y saben perfectamente que, como se prueba en los vídeos de 'youtube', ese es Revilla. Este es Revilla.

Tribuna de opinión publicada el 18 de abril de 2013 en El Diario Montañés