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Madrazo advierte de que el PSOE quiere arreglar con impuestos el agujero de las cuentas públicas

La candidata del PP al Congreso de los Diputados, Ana Madrazo, explicó esta mañana en rueda de prensa la reforma fiscal que propone el Partido Popular "para crear empleo, aumentar la cobertura solidaria del Estado del Bienestar y reducir el fraude a las cuentas públicas".

 

La cabeza de lista del Partido Popular al Congreso de los Diputados por Cantabria, Ana Madrazo, advirtió hoy que el PSOE quiere financiar durante dos años más el "agujero intergaláctico" que existe en las cuentas públicas a través de la subida de impuestos.

Así lo dijo en una rueda de prensa en la que explicó la reforma fiscal que propone el Partido Popular para garantizar los servicios públicos, ayudar a crear empleo y acabar con las grandes bolsas de fraude.

La candidata del PP calificó de "demagógica" e "irreal" la subida de impuestos al alcohol y al tabaco que propone Alfredo Pérez Rubalcaba para arreglar la deuda que el PSOE ha dejado en Sanidad puesto que apenas solucionarán la deuda de más de 15.000 millones que ha dejado el PSOE en Sanidad.

Ana Madrazo se pronunció en el mismo sentido sobre la creación del impuesto de la banca que dijo "acabará repercutiendo en los clientes encareciendo aún más el crédito" y sobre la restauración del impuesto de patrimonio "que el mismo Rubalcaba votó a favor de eliminar".

Madrazo subrayó que desde la óptica del Partido Popular la mejora de las cuentas públicas solamente podrá venir del crecimiento del empleo y de racionalizar los gastos de la administración y, por eso, aseveró que la reforma fiscal es "absolutamente urgente".

 

TEXTO DE LA RUEDA DE PRENSA:

Durante los últimos años los españoles hemos afrontado la mayor subida de impuestos directos e indirectos de la democracia.

Al mismo tiempo, hemos sido testigos del más grave deterioro de las cuentas públicas, del retroceso económico y de la destrucción de empleo.

La política fiscal socialista ha obstaculizado la transformación de las estructuras económicas, ha impedido la flexibilización de la economía, y ha desincentivado el ahorro y el emprendimiento.

La política fiscal de la izquierda ha desmotivado la inversión y ha introducido demasiadas ineficiencias en el funcionamiento de los mercados.

El Gobierno donde Rubalcaba era vicepresidente ha subido cuatro veces del IRPF: quitando la deducción de 400 euros; aumentando indiscriminadamente los tipos impositivos al ahorro; eliminando la ayuda por nacimiento sin tener en cuenta la renta del beneficiario; y finalmente eliminando la deducción por vivienda habitual.

El Gobierno de Rubalcaba subió además los impuestos indirectos: IVA desde julio, impuestos especiales en dos ocasiones, duplicando el del tabaco.

Todas estas medidas, de manera acumulada, le han supuesto a una familia media española una subida de impuestos de unos 2.700 euros. Es una barbaridad.

Y lo que propone el PSOE en su programa es seguir subiendo todavía más los impuestos a las familias.

El Partido Popular, en cambio, es partidario de una reforma fiscal que garantice los servicios públicos, ayude a crear empleo y acabe con las grandes bolsas de fraude.

La reforma tributaria será parte integrante de la estrategia económica de recuperación y creación de empleo, y actuará de forma coordinada con el resto de la agenda de reformas estructurales.

Medidas:

Modernizaremos el impuesto sobre la renta con el objetivo de favorecer el ahorro, la inversión y el empleo.

Fomentaremos fiscalmente el ahorro a largo plazo mediante la creación de una nueva deducción en el IRPF por el incremento anual del ahorro, que incluya la adquisición de vivienda habitual.

Mejoraremos la tributación de las prestaciones de los planes de pensiones.

Elevaremos los mínimos familiares en el IRPF adaptándolos mejor a las circunstancias de los contribuyentes, especialmente en relación con las familias numerosas.

En el impuesto de sociedades generalizaremos la aplicación a las empresas de reducida dimensión el tipo impositivo del 20 por ciento; extenderemos el ámbito de aplicación del tipo del 25 por ciento.

Simplificaremos el sistema de deducciones.

Mejoraremos el tratamiento fiscal de los beneficios de la actividad económica reinvertidos en el propio proyecto empresarial para reforzar la capacidad de autofinanciación de nuestras empresas, especialmente en el caso de pymes y autónomos.

Reformaremos la tributación por módulos teniendo en cuenta las circunstancias de las empresas y la gestión tributaria.

Modificaremos, de acuerdo con la normativa europea, el régimen del IVA para que autónomos y pymes no tengan que pagar el impuesto hasta que efectivamente se haya efectuado el cobro de las facturas correspondientes.

Aplicaremos a la compraventa de viviendas habituales el IVA superreducido (4%) de forma transitoria.

Reduciremos el impuesto de transmisiones patrimoniales aplicable a la vivienda usada.

Transformaremos en una tasa el gravamen por actos jurídicos documentados de manera que no supere el coste de los servicios verdaderamente prestados.

Adecuaremos la legislación sancionadora a la actuación de tramas organizadas de defraudación, la utilización de paraísos fiscales y otros delitos complejos contra la Hacienda Pública y la Seguridad Social.

Todas estas medidas constituirán una reforma fiscal que servirá para crear empleo, aumentar la cobertura solidaria del Estado del Bienestar, y reducir el fraude a las cuentas públicas.

Únicamente un Gobierno del Partido Popular con mayoría parlamentaria sólida puede llevar a cabo de forma coherente todo este cambio tributario en beneficio de los hogares y las empresas.

La alternativa a esta reforma es lo que ha dicho Rubalcaba: seguir con un agujero intergaláctico de nuestras cuentas públicas durante dos años más, y financiarlo a costa de subidas generalizadas de impuestos.

La única receta de Rubalcaba para todo es subirnos los impuestos:

¿Cómo quiere arreglar la deuda que el PSOE ha dejado en sanidad? Subiendo los impuestos al alcohol y al tabaco. Pero no dice que apenas solucionarán la deuda de más de 15.000 millones que ha dejado el PSOE en Sanidad.

¿Cómo quiere arreglar el problema de la falta de crédito? Pues creando un impuesto a la banca. Pero no dice que eso repercutirá en los clientes encareciendo aún más el crédito y también se calla que él bajó en 2008 los impuestos a los banqueros aprobando el llamado aguinaldo fiscal a los bancos.

¿Cómo quiere arreglar el problema del paro? Con el Impuesto de Patrimonio que ha reestablecido. Pero no dice que con lo que recaudará ese impuesto en un año no se pagan ni los intereses de la deuda pública dos semanas.

El Partido Popular ya demostró en los años 90 que una reforma tributaria bien hecha produce más recaudación para el estado porque hace crecer la economía, no los impuestos. La mejora de las cuentas públicas solamente podrá venir del crecimiento del empleo y de racionalizar los gastos de la administración. La reforma fiscal es urgente.

 

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