Ante los integrantes del máximo órgano de dirección del PP, acto en el que también intervino el presidente de la Junta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, el presidente de los populares cántabros también se refirió a que "Cantabria necesita no sólo un cambio de Gobierno, sino también un cambio de gobernación, un cambio en la manera de gobernar". Asimismo, Diego opinó que regionalistas y socialistas "deberían presentarse juntos" a las elecciones "para no engañar a los ciudadanos", porque "si la aritmética se lo permite, pactarán de nuevo".
INTERVENCION DE IGNACIO DIEGO ANTE LA JUNTA DIRECTIVA DEL PP:
Hoy tenemos el honor de contar con el Presidente de Galicia, nuestro amigo Alberto Núñez Feijoo. Querido Alberto, de todo corazón, muchas gracias por tu presencia hoy entre nosotros y por tu constante apoyo al Partido Popular de Cantabria.
Es una satisfacción poder contar contigo precisamente hoy, en esta primera Junta Directiva Regional con el año político en marcha, en la que hablaremos de las claves del cambio que proponemos para Cantabria. Que proponemos y que vamos a llevar cabo con toda seguridad.
Tu presencia, Alberto, tiene para nosotros una significación muy intensa. Porque tú representas la capacidad del Partido Popular de recuperar, desde la oposición en una comunidad autónoma que había gobernado, el liderazgo social y político para un cambio total de rumbo. Todos sabemos la deriva en que estaba inmersa Galicia pero que se ha corregido con tu programa de gobierno y con el respaldo de la sociedad gallega a las nuevas ideas y los nuevos planteamientos.
Hoy Galicia es en España un gran ejemplo no sólo de gestión del Partido Popular, sino también del hecho de que no hay destinos irremediables en políticas, que siempre una región puede ser dueña de su propio camino y descartar las malas soluciones para emprender acciones muy diferentes y mucho más esperanzadoras.
Muchas de las claves del cambio se ven perfectamente representadas en el cambio que hubo en Galicia, y por eso nuestro agradecimiento hoy por tu visita es, si cabe, aún mayor. Tú lideraste el trabajo político para reemplazar a una estéril coalición de la izquierda y el nacionalismo, que impedía una gestión coherente de la autonomía y de la economía.
También nosotros tenemos enfrente en los próximos meses la recta final de un trabajo muy parecido: sustituir a una coalición de intereses que no es capaz de ofrecer soluciones a una comunidad en crisis económica y social, una comunidad que asiste con gran inquietud a la prolongación de los problemas del desempleo y de la falta de inversiones, y que quiere salir de ese miedo y esa inquietud dejando tras un bipartito Revilla-Zapatero que no puede presentar ninguna acción real aparte de las fuertes subidas de impuestos y la reducción de los ingresos de los hogares. Eso real: lo demás es sólo humo y palabras que el viento se lleva y que mañana serán desmentidas por otras palabras diferentes.
Por tanto, querido Presidente, amigas y amigos de la Junta Directiva Regional del Partido Popular, Cantabria necesita un cambio. Lo necesita para superar la crisis económica, social e institucional que padece. Cuando una buena región, con el potencial de Cantabria, no funciona, hay que cambiar a su gobierno. Un cambio para conseguir que nuestra región cree empleo, recupere el crecimiento económico y abra un gran ciclo de inversión y dinamismo empresarial. Podemos y debemos ser un paraíso de la inversión empresarial y de la innovación.
Cantabria merece una realidad muy diferente a la que está viviendo estos últimos tiempos. La podemos conseguir este 2011 porque el PP ha demostrado que las cosas se pueden hacer de otra manera a como las hace el partido socialista en solitario o en un bipartito.
Hoy la gente teme no llegar a fin de mes, perder su trabajo o su pequeño negocio, y que los servicios públicos como la Sanidad o la Educación sigan empeorando de nivel. Hoy la gente está muy preocupada con una inflación del 3% cuando los sueldos se bajan o congelan y cuando el paro está en cifras elevadísimas.
Pero desde el Partido Popular de Cantabria queremos lanzar un mensaje claro: esto tiene arreglo, si cambiamos de gobierno y de forma de gobernar.
¿Cuáles son las claves de este cambio que en el PP proponemos para Cantabria? La alternativa del Partido Popular para Cantabria es un cambio real e ilusionante. Un cambio centrado en:
1. Crear empleo con intensidad,
2. Recuperar el crecimiento económico desde la cultura de la innovación y
3. Abrir una gran etapa de inversión empresarial.
Y para conseguirlo, ofrecemos a Cantabria un gobierno austero, serio y eficaz.
Me gustaría hablar de cada una de estas ideas fundamentales de nuestro proyecto.
EMPLEO
Hemos alcanzado la cifra histórica de los 44.000 parados en Cantabria. El paro ha ido creciendo sin freno en esta legislatura ante la pasividad del bipartito. Por el contrario, nuestra gestión tendrá como prioridad la creación de empleo. Para conseguirlo, apoyaremos de verdad a las empresas, las PYMEs y los autónomos, los mayores creadores de empleo de nuestra región.
Ha pasado el tiempo. Y Cantabria y España han conocido ya gobiernos de todos los partidos. Por eso, los ciudadanos saben cuál es el partido más fiable para crear empleo. Las políticas del Partido Popular siempre han creado puestos de trabajo y nosotros también lo vamos a hacer en Cantabria. Primera clave: el empleo, la máxima prioridad.
¿Cómo se puede crear empleo? Sólo hay un camino: fomentando la inversión empresarial y favoreciendo la formación. Por tanto, tenemos que pactar con los empresarios un marco de grandes inversiones para los próximos años, dando facilidades fiscales, garantizando seguridad jurídica, siendo activos en temas de suelo, de energía y de trámites ambientales y urbanísticos, en definitiva convirtiendo a la Administración y a los empresarios en aliados para el desarrollo y el empleo.
Para lograr esto, hay que bajar impuestos y poner de acuerdo a todos los implicados en cada proyecto. Hay que acostumbrarse a que la promoción del empleo necesita cooperación entre lo público y lo privado, programación conjunta.
Tenemos que llegar, como ya mencioné en diciembre, a un objetivo de 800 millones de euros/año de inversión privada en Cantabria. Ese es el horizonte por el que tenemos que trabajar para salir del drama actual de los 45.000 parados y de una economía paralizada; para ir hacia el pleno empleo en esta década. Podemos hacerlo pero será con estas políticas, no con la demagogia del bipartito ni con su incapacidad crónica para gobernar bien.
Y el empleo también se promueve mediante la formación en las profesiones. A esto se le debe dar un cambio radical. Esta semana leíamos en la prensa el ejemplo de Alemania, que ha ofrecido a 500 españoles un período de formación profesional en el norte del país, para que después tengan colocación en diversos sectores. Es tremendo que los alemanes tengan ideas para dar formación profesional a españoles y que nosotros mismos no seamos capaces de poner esos esquemas en marcha, en colaboración con las empresas y los empresarios.
La formación profesional es uno de los grandes vacíos del bipartito de Cantabria, que se ha limitado a la cosmética y a pequeñas cosas, sin afrontar esta realidad: que la formación profesional hay que hacerla con las empresas, en simbiosis entre lo educativo y lo productivo. Porque es lo que funciona en países más avanzados como el que he mencionado.
Cantabria no tiene que mirar con Revilla a Zapatero, tiene que mirar con nosotros a Merkel. Alemania está en niveles récord de puestos de trabajo. Nosotros en niveles récord de paro. Hay unas políticas que funcionan y otras que no. El Partido Popular defiende en Cantabria -y aplica ya en Galicia- las que funcionan.
Así pues, primera clave: luchemos con inteligencia por recuperar una senda hacia el pleno empleo de la mano de la inversión empresarial y de la formación profesional.
CRECIMIENTO
Segunda clave: recuperar el crecimiento económico. Lo vemos en la calle, en nuestro entorno. A los cántabros cada vez les cuesta más llegar a fin de mes. La coincidencia en el poder de Zapatero y de Revilla el bipartito ha sido fatal para las empresas y hogares de nuestra tierra. Nos han cosido a subidas de impuestos y recortes para pagar sus gravísimos errores.
Con Zapatero y Revilla esta región no tiene ningún porvenir.
Nosotros proponemos un reajuste fiscal que active el consumo y la capacidad de ahorro de los cántabros. Y proponemos apoyar a los emprendedores e implantar la cultura de la innovación en las empresas. Vamos a competir en base a la creatividad y la capacidad de una de las poblaciones con mayor nivel educativo y cultural de España. Vamos a promover la inversión en I+D desde el potencial ya existente en el Campus de Excelencia Internacional de la Universidad de Cantabria y en sus institutos especializados, como el de Hidráulica, el de Biomedicina, el de Finanzas o el de Física. Hay que actuar con el conocimiento sobre el sistema productivo para cambiar el modelo y dar un futuro a nuestros jóvenes.
Todo ello con el fin que Cantabria vuelva a crear riqueza. Tenemos el objetivo fundamental que en cada casa de Cantabria se pueda vivir mejor porque Cantabria vaya, en general, mucho mejor.
No podemos competir con los países emergentes en salarios. Porque no vamos a competir haciendo más pobres a nuestros trabajadores. Nuestra moneda es el euro: no vamos a competir devaluando la divisa directa o indirectamente, como hacen otros países, algunos de ellos muy importantes y supuestamente amigos nuestros.
Sólo podemos competir tomando ejemplo de otros países del norte de Europa que son nuestros socios en la Unión Europea. Hay que competir con el valor añadido del conocimiento, con nueva tecnología, con innovación, con la preparación de nuestro capital humano, con la calidad de nuestros productos.
Esto significa entrar de lleno en la Sociedad del Conocimiento y eso es lo que ha hecho el Partido Popular de Cantabria cuando ha apoyado sin fisuras, en el Parlamento de Cantabria y en los ayuntamientos de Santander y Torrelavega, todos los proyectos de campus internacional que suponen un incremento de la cooperación entre mundo universitario y mundo empresarial.
Por cierto, un fenómeno que también en Galicia se está produciendo con el Campus Vida de Santiago de Compostela y otro reciente Campus del Mar para Vigo y la Coruña, tengo entendido y que me corrija el Presidente si hay alguna imprecisión en este resumido dato.
Todas las regiones avanzadas están apostando por este nuevo modelo basado en aplicaciones empresariales de los resultados de la investigación avanzada. Ahí se trazará la frontera en 2020 entre regiones desarrolladas y regiones rezagadas. Y nosotros queremos que Cantabria esté entre las regiones desarrolladas.
Así pues, crecimiento económico mediante la atracción de capital privado y el fomento de la innovación y de la investigación. La atracción de capital esté ahora, por la desidia del bipartito, en un nivel muy bajo. Y el fomento de la innovación debe ir a un ritmo de ejecución muy superior, porque Cantabria necesita resultados tangibles y soluciones cercanas, no, como decía aquella película, 'horizontes lejanos'. Necesitamos horizontes cercanos.
INVERSIÓN EMPRESARIAL
La tercera clave: abrir un gran ciclo de inversión y dinamismo empresarial en Cantabria. Esta tierra tiene un potencial que el bipartito no ha sabido aprovechar. Nuestra región está frenada y hay que confiar en la inversión empresarial para conseguir crear empleo y recuperar el crecimiento.
Esta tierra tiene que volver a ser un paraíso para los emprendedores. En el mundo rural y en nuestras grandes ciudades. Sin emprendedores, no hay empresas de futuro, ni actividad industrial del mañana. No podemos seguir desperdiciando todo el talento y el potencial que hay en Cantabria. Esto también debe cambiar.
Ya he mencionado que el objetivo tiene que ser en esta década un ritmo anual de 800 millones de euros en inversión privada. Pero esto es un objetivo genérico. Luego hay que descender a los planes estratégicos para los sectores productivos.
Necesitamos planes estratégicos urgentísimos en al menos cinco áreas:
- Un Plan Estratégico de Energía que sustituya al Plenercan y fije el perfil de la economía sostenible en Cantabria, dando seguridad jurídica y viabilidad económica a todas las operaciones de eficiencia energética y reducción de las emisiones contaminantes y de efecto invernadero.
- Un Plan de Ordenación del Territorio que vaya unido con un Plan Especial Territorial para Suelo Empresarial, que dé sostenibilidad ambiental y seguridad jurídica a los polos de desarrollo que vamos a crear junto con los empresarios en las diferentes comarcas de Cantabria y permita reactivar.
- Un Plan Estratégico de Turismo, que aproveche el gran potencial de Cantabria durante todo el año, superando el agotamiento de las fórmulas actuales que ya no dan más de sí y piden a gritos un relevo.
- Un Plan Estratégico de Ganadería que permita la salvación de nuestras explotaciones de vacuno de leche y de carne y las ponga en el camino para el crecimiento con nuevas producciones de más valor añadido que permitan volver a crear empleo y tejido empresarial en el campo de Cantabria.
- Y, por último, es urgentísimo un Plan Estratégico de Innovación, que establezca junto con las empresas y los municipios los objetivos de la década en promoción de cultura innovadora, centros de creatividad y de la calidad de los servicios. Y aquí tendremos que incluir un gran objetivo especial, que es garantizar un nivel de Inglés cada vez más alto para los jóvenes que terminan la Educación Obligatoria. Porque la competencia lingüística en Inglés puede ser determinante tanto para la localización de inversión extranjera en Cantabria como para la expansión de empresas cántabras en otros países y en sectores tecnológicos. Para ello puede que tengamos que desarrollar un sector de pymes dedicadas a la enseñanza de idiomas. Es un sector que ya existe y con el que hay que sentarse a hablar para hacerlo más grande.
En definitiva, estoy seguro que si conseguimos estas tres claves (el empleo, el crecimiento y la inversión empresarial), Cantabria podrá dejar atrás la resignación y el empantanamiento, y mirar con esperanza el futuro.
Todas estas metas son mucho más alentadoras y positivas que la triste política actual de no hacer nada, de subir impuestos, recortar sueldos y contemplar impasibles desde Youtube cómo el paro sube cada vez más.
El Partido Popular propone un nuevo rumbo económico para Cantabria y para España. Esto significa que propone un nuevo gobierno en Cantabria y un nuevo gobierno en la nación.
UN NUEVO GOBIERNO PARA UNA NUEVA GOBERNACIÓN
Cantabria necesita no sólo un cambio de gobierno sino también un cambio de gobernación, un cambio en la manera de gobernar. Tenemos que explicar a los ciudadanos qué instrumentos y decisiones tomaremos desde el gobierno para conseguir hacer realidad el cambio.
Formaremos un gobierno que ya en su propia composición y actividad represente un cambio. Frente al personalismo y la desunión del bipartito, nosotros aportaremos un equipo de trabajo. Este equipo lo formarán personas cualificadas para sus cargos, con la experiencia de conocer los problemas de Cantabria después de haber recorrido la región de punta a punta estos últimos años.
Nuestro gobierno tendrá tres características irrenunciables. Será un gobierno austero. Será un gobierno centrado en la eficacia. Y será un gobierno serio, porque es muy serio lo que nos jugamos en los próximos años: el futuro de las empresas y de miles y miles de puestos de trabajo. Sobre esto no hay bromas posibles.
Seremos un gobierno austero porque es nuestra manera de entender la política, dando a lo público sus funciones sin olvidar que también debemos tener un sector privado fuerte. Lo he dicho y lo repito: no debe haber más de 8 consejerías; hay que reducir más de la mitad de los altos cargos; y hay que reorganizar empresas públicas y que no pasen de 20.
Este es mi compromiso para hacer de Cantabria una autonomía viable y fuerte. Austeridad pública para hacer más con menos dinero. Es inadmisible el despilfarro actual con tantos hogares pasando extremas dificultades.
Como os decía, nuestra alternativa contará con un gobierno centrado en la eficacia. Sin eficacia en la gestión no hay servicio público y para eso, para servir a nuestra tierra, gobernaremos. Lo público debe centrarse en los servicios que le corresponden. Esto es ser eficaz en la gestión.
Ser eficaz en la gestión permitiría, por ejemplo, que Cantabria tuviera una Sanidad de calidad y sin las peores listas de espera de toda España. Contamos con grandes profesionales en el sector y sin embargo tenemos la Sanidad manga por hombro.
Ser eficaz en la gestión permitiría también conseguir éxitos tangibles en Educación, por ejemplo en el dominio del Inglés por los adolescentes o en la implantación de un modelo de formación profesional realmente conectado con el mundo productivo. Por tanto, un sistema educativo con más éxito académico y social.
Además, Cantabria debe tener un gobierno serio. Cualquier región lo debe tener, pero aquí y en la situación actual se hace más imprescindible que nunca. Cuando Artur Mas y su gobierno han abierto la caja en Cataluña han comprobado que el tripartito ha dejado un déficit mucho peor del que pregonaba. El bipartito de Cantabria está haciendo lo mismo y por eso ocultan facturas millonarias y arrancan las hojas de las auditorías como la de CANTUR.
Esto también cambiará. Tendremos un Gobierno de Cantabria que, además, será un gobierno de los cántabros. Y lo será porque los cántabros lo habrán elegido y no Zapatero. Ni Zapatero, ni los dirigentes del PSOE en Madrid, a cientos de kilómetros de nuestra realidad. Un gobierno de los cántabros para que siempre esté centrado, precisamente, en los cántabros.
Para acabar, querría deciros que el cambio, obviamente, necesita una clave política. Y ésta también debemos explicarla. PSOE y PRC llevan ocho años gobernando juntos y si la aritmética se lo permite, pactarán de nuevo. Realmente, lo que deberían es presentarse juntos, para no engañar a los ciudadanos.
En estas elecciones sólo se podrá escoger entre dos mayorías: el cambio en positivo del Partido Popular o el continuismo del pacto PRC-PSOE cuyas políticas nos ha llevado hasta la situación actual. Los cántabros deben saber que su voto sólo puede ser a favor del continuismo o de cambiar las cosas.
Llevamos ya treinta años de democracia y los ciudadanos se dan cuenta que los gobiernos elegidos en los despachos y no en las urnas, no funcionan. Lo hemos visto en los últimos tiempos por toda España. Primero, los ciudadanos dieron la espalda al bipartito en Galicia. Después, han rechazado al tripartito en Cataluña. Este año, veremos cómo los cántabros despiden al bipartito del PSOE-PRC. Porque en tiempos de crisis los ciudadanos quieren gobiernos fuertes y eficaces.
Quiero terminar agradeciendo de nuevo la presencia de Alberto. Me siento muy cercano a él, a su gobierno y a los gallegos. Todos ellos son un referente porque decidieron cambiar las cosas y lo consiguieron, como lo conseguiremos nosotros, los cántabros.
"Llegó el momento". Eso es lo que toda Galicia exclamó en 2009. Y esto es lo que Cantabria también va a exclamar en 2011 porque ha llegado el momento de optar por un proyecto de futuro lleno de ilusión, ideas y soluciones.
Empleo, crecimiento e inversión empresarial fruto de un gobierno austero, serio y eficaz. Este es el cambio en positivo que ofrecemos a todas las personas de nuestra tierra. Os pido entusiasmo en la tarea, unidad en su ejecución y confianza en el resultado. El bipartito ya da pitidos como los móviles sin batería. El Partido Popular va a ser el gran protagonista del cambio que Cantabria demanda, necesita y va a respaldar con una enorme energía cívica en las urnas.
Vamos a hacer todos bien nuestro trabajo, en beneficio de todas las personas que esperan de nosotros que demos lo mejor y que acertemos en nuestras acciones. Cuento con todos vosotros para este programa de cambio en Cantabria, que es parte esencial del cambio en España y que personas como el Presidente de Galicia vienen impulsando en los últimos años.
Vosotros sois los elegidos en la estructura del partido y en las instituciones para liderar este proceso de cambio. Todos y cada uno de vosotros compartís generosamente la responsabilidad de sacar este proyecto adelante para que el Partido Popular de Cantabria pueda devolver a nuestra región al buen camino y cerrar ya un capítulo sin sentido de su historia autonómica.
Se espera mucho de todos nosotros. No vamos a decepcionar a una sociedad que nos reclama. Vamos todos nosotros a dar la respuesta correcta y vamos a tomar la riendas de una autonomía que tiene que volver a funcionar como es debido.
Todos vosotros sois necesarios. Habéis representado los valores y la fortaleza del Partido Popular en tiempos difíciles donde nuestro mensaje no era muy escuchado, porque primaba la demagogia y el no querer mirar de frente a la realidad social. Pero hoy sí se nos escucha. Hoy tenemos que poner esos valores de unidad del partido y de fe en las personas en un nuevo plano político, que es ofrecer una alternativa que es real, que da confianza, que va a triunfar y va a gobernar para todos, como siempre hizo con grandes resultados.
Os pido perseverancia en la tarea. Las dificultades no son más pequeñas, pero el camino por recorrer ya no es tan grande. Hagamos el último esfuerzo porque Cantabria espera de todos nosotros que asumamos el liderazgo de las soluciones. Y lo vamos a hacer: en España, en la comunidad y en los ayuntamientos. Como se ha hecho en Galicia. Somos un partido de soluciones. Que se note. Muchas gracias a todos.
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