Partido Popular en Cantabria

Asimismo, Cristina Mazas pidió al Gobierno que en estos seis meses que faltan para las elecciones "deje a un lado los intereses electoralistas" y aplique criterios de "prudencia y austeridad para unas cuentas públicas que ya comprometen los presupuestos para los próximos años".

La parlamentaria regional del PP dijo que su formación política no quiere lanzar un "mensaje pesimista" sino "realista" sobre la situación de las cuentas públicas regionales y añadió que en momentos de crisis económica hay que "priorizar aquello que es necesario" y no hacer en el año 2011, sino en otro año, lo que es menos necesario.

Según explicó Cristina Mazas, si el Gobierno cántabro ejecuta completamente las previsiones de deuda para este año contempladas en los presupuestos regionales de 2011, cuando se cierre el ejercicio la administración general de la Comunidad Autónoma (las consejerías) tendrá una deuda a largo plazo de 1.077 millones de euros, frente a los 271 millones que había a finales de 2002, último año de gestión completa del Partido Popular.

Eso significa que la deuda se ha multiplicado por cuatro en este tiempo y fruto de ese incremento, las partidas presupuestadas este año para amortización e intereses de la deuda son las dos que más crecen en el presupuesto regional.

En concreto, Mazas ha señalado que la partida para amortizaciones sube un 375 por ciento, al pasar de 30 millones de euros en 2010 a 142 millones para este ejercicio; mientras la cuantía consignada para pagar intereses se eleva a 74,5 millones de euros, un 69% más que el pasado año, cuando era de 44 millones.

La diputada de los populares cántabros ha puesto también el ejemplo de los últimos datos de la deuda publicados por el Banco de España, según los cuales, en un año la deuda cántabra ha crecido un 66% y la región ha pasado de ser la comunidad con menor porcentaje de deuda en relación al PIB, a situarse en la cuarta posición.

A esto, ha subrayado que hay que añadir también la deuda a corto plazo, cuyo "único límite" es que a 31 de diciembre no supere los 200 millones de euros. En cambio, con el PP, la deuda a corto tenía que estar saldada en su totalidad al cierre del ejercicio

Del mismo modo, ha alertado del incremento de la deuda de las empresas públicas, que ha crecido un 189% con respecto a 2009 y un 875% sobre 2002. A finales de 2011 la previsión es que llegue a 439 millones de euros, cifras que para Mazas son "significativas y considerables".

La diputada 'popular' también ha aludido a los pagos derivados de la financiación estructurada, que aunque no computen como deuda, "sí suponen compromisos futuros de pago" que salen del presupuesto y reducen por tanto el dinero que se podrá destinar a otras cuestiones.

Sólo en 2011 los pagos derivados de la financiación estructurada ascienden a 54 millones de euros, y para el periodo 2011-2015 la previsión es de 250 millones, sin contar lo que se contrate a lo largo de este año.

Y esas son sólo las previsiones que recoge el presupuesto, que no hace proyecciones a más largo plazo, pero Mazas ha recordado que algunas obras, como el Hospital Tres Mares, por ejemplo, se seguirán pagando hasta 2035. En definitiva, considera que esos compromisos van a suponer un "lastre" para las cuentas regionales.

En esta situación, el PP va a seguir "muy de cerca" la evolución de las cuentas públicas regionales en las que, además de la "deuda", les preocupa el déficit y las medidas que ha tomado el Gobierno cántabro para atajarlo: por un lado, adelantando el cierre del ejercicio presupuestario, con lo cual los gastos posteriores a esa fecha, según Mazas, pasan a 2011; y por otro lado, "retrasando" los pagos a proveedores.

La parlamentaria ha recordado que el Grupo Popular ya planteó diversas medidas de "ahorro y austeridad" en el marco del debate presupuestario que pasan, no sólo por reducir la estructura de la administración, sino también por "racionalizar" una serie de gastos.

Por ejemplo, en el PP no entienden que el gasto de personal para 2011 baje entre un 7% y un 8% por el recorte salarial aplicado a los funcionarios, mientras el gasto de personal y funcionamiento en las empresas públicas crece. A su juicio, si se pide "austeridad" a los funcionarios, el resto de la administración "se debe regir por los mismos criterios".

Tampoco entiende que el presupuesto de 2011 baje en líneas generales un 1,5%, llegando al 8,1% en Sanidad y al 5,7% en Educación, mientras los gastos de funcionamiento de la administración (excluyendo las cuestiones básicas) sólo bajan un 1,8%. En su opinión, si se pide a los ciudadanos un ajuste en la sanidad, "la administración también debe apretarse el cinturón".

Por último, también ha cuestionado que se autorice a las empresas públicas a endeudarse en 400 millones de euros porque, desde su punto de vista, es "bastante cuestionable" que sea necesario, ya que ese dinero no va a "servir" ni para el Plan de Choque ni para fomentar el empleo.

[Con información de Europa Press]

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