TEXTO DE LA RUEDA DE PRENSA:
El objeto de esta rueda de prensa es hacer público que se ha presentado una batería de preguntas en relación con las actuaciones arqueológicas efectuadas en el exterior de la cueva de Altamira. Actuaciones que, al parecer, y según se desprende del contenido de los informes técnicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), han podido influir negativamente en la conservación de las pinturas paleolíticas.
Nos preocupa lo importante: cuál es el estado real de conservación de las pinturas de Altamira y qué medidas se han adoptado o se piensan tomar desde las tres administraciones implicadas -Ministerio, Gobierno de Cantabria y Ayuntamiento de Santillana del Mar- en relación a la preservación del que es un patrimonio único en el mundo, el referente más sobresaliente de la cultura e identidad de Cantabria y España en el exterior.
Desde la responsabilidad que nos compete y nos concierne, el Grupo Popular cree que el Gobierno de Cantabria debe comenzar a informar con rigor y seriedad sobre lo realmente importante.
Si se presupone que el Servicio de Patrimonio Cultural de la Consejería ha estudiado con detenimiento los informes sobre el estado de conservación de la cavidad y de las pinturas realizados por el CSIC. Y que se ha tenido conocimiento de la realización de excavaciones en los últimos meses en el exterior de la cueva de Altamira y que éstas han podido influir en la conservación de las pinturas paleolíticas, no parece serio, y seguramente no ocurriría en ningún otro lugar del mundo, que los ciudadanos de Cantabria conozcan los resultados científicos de los trabajos realizados en el interior de la cueva a través de los medios de comunicación y no haya sido el Gobierno de Cantabria quien haya informado de primera mano sobre un asunto de sumo interés que no sólo atañe a todos los ciudadanos de Cantabria sino también a todos los ciudadanos del mundo, porque no hay que olvidar que las pinturas paleolíticas de Altamira son Patrimonio Universal.
Y bajo ningún concepto es admisible o justificable que los dos máximos responsables del Ayuntamiento de Santillana del Mar (como titular de la cueva) y de la Comunidad Autónoma (como máximo responsable de la conservación del Patrimonio Cultural), los Sres. Rábago y Revilla, se hayan dedicado durante el último año a hacer declaraciones frívolas y fuera de lugar en relación a la reapertura restringida de la cueva de Altamira, llegando al esperpento de afirmar el Sr. Revilla que lo importante es que las "pinturas las disfrute esta generación" o llegando a concluir el Sr. Rábago "que lo importante es que siga cayendo la panoja".
Declaraciones irresponsables y grotescas que son una nueva concesión al despropósito por parte de quienes han mantenido una actitud pusilánime y servil durante los últimos 8 años, como lo demuestra el hecho de que tanto el Ayuntamiento de Santillana del Mar como el Gobierno de Cantabria hayan permanecido mudos a pesar de haber sido marginados de cualquier decisión en este tiempo en relación a la gestión de Altamira -fundamentalmente desde que se disolviera en agosto de 2007 el Consorcio de Altamira-.
Y no es menos alarmante e indigno que en el último año de gobierno de la actual legislatura se pretenda instrumentalizar la reapertura de Altamira desde un planteamiento claramente electoralista, aunque ello pueda suponer poner en peligro la conservación de las pinturas para generaciones futuras.
¿Qué información ha solicitado el Grupo Popular con relación a los trabajos de investigación realizados en el interior de la cueva de Altamira sobre el estado de conservación de la cavidad y de las pinturas?
El Grupo Popular solicitó en la primavera de este año 2010, el 1 de junio, información al Gobierno de Cantabria respecto a el Informe Científico elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas sobre el estado de conservación de las pinturas y de la cueva (remitido al Gobierno de Cantabria antes de la celebración de la primera reunión del Patronato de Altamira el pasado 8 de junio).
No hemos obtenido respuestas por parte del Gobierno de Cantabria con respecto a la información solicitada. El mismo Gobierno que ha acusado al Ministerio de no contar con Cantabria en la toma de decisiones sobre Altamira y el mismo Gobierno que en los últimos meses acusa al Ministerio de Cultura de ocultar información relevante para tomar la decisión de reabrir Altamira.
Es el mismo Gobierno que practica en Cantabria la misma estrategia de ocultación sobre la información solicitada desde el Parlamento de Cantabria.
Hemos esperado pacientemente desde que se constituyó el pasado 8 de junio el nuevo Patronato de Altamira y se encargó a un grupo de expertos la elaboración de una propuesta científica que ayudase a decidir al Patronato si es posible la reapertura a partir del establecimiento de un régimen de visitas restringido.
Lo único que sabemos a día de hoy es que las visitas experimentales que se iban a realizar para poder elaborar por el equipo de expertos la propuesta científica no se han producido.
Y qué nos encontramos a mediados del mes de diciembre y de nuevo nos tenemos que conformar con conocer sólo a través de los medios de comunicación un asunto de capital importancia: la realización de excavaciones arqueológicas en el exterior de la cueva en este mismo año 2010, potencialmente lesivas, según se desprende del minucioso estudio del CSIC.
Ello a pesar de que, según los informes del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, una de las razones del origen de las bacterias que han colonizado y se han estabilizado en la cueva, en buena medida, son resultado de las actuaciones arqueológicas realizadas tanto en el interior como en el exterior de la cueva,
Creemos que esta cuestión tiene la suficiente relevancia -estamos hablando de la conservación de un patrimonio único en el mundo- como para que el Gobierno de Cantabria, en primer lugar, cumpla con su deber de información y remita al Parlamento de Cantabria la documentación solicitada en relación a los informes del CSIC sobre el estado de conservación de la cueva y las pinturas.
Conteste a 9 preguntas que se han formulado por escrito y se van a registrar hoy mismo cuyo objetivo es conocer si ha sido informado el Gobierno de Cantabria del comienzo, naturaleza y objetivos de las excavaciones arqueológicas realizadas en el exterior de la cueva de Altamira.
Si el Gobierno tiene información oficial sobre la situación actual de los trabajos de investigación arqueológica que se vienen desarrollando.
Si el Ministerio de Cultura ha remitido a la Consejería informes técnicos en los que se haga referencia a la influencia negativa que dichas actuaciones arqueológicas puedan tener en la conservación de las pinturas.
Si las excavaciones arqueológicas incumplen con lo dispuesto en la Ley de Patrimonio Cultural de Cantabria y el Decreto 36/2001 de desarrollo parcial de ésta en relación al régimen jurídico que regula la autorización de las actuaciones arqueológicas en Cantabria.
Cuál es el marco legal que regula la autorización de actuaciones arqueológicas en el interior y exterior de la cueva de Altamira.
Si considera el Sr. Marcano que la no información sobre las actuaciones arqueológicas realizadas en Altamira supone menoscabo a la autoridad del Gobierno de Cantabria en relación a la conservación del patrimonio más universal que alberga Cantabria.
Y si puede estar en peligro la distinción de Altamira como Patrimonio de la Humanidad ante la realización de unas actuaciones arqueológicas que afectan a la conservación de las pinturas.
Además de informar, se deben tomar decisiones. Porque si realmente no se ha contado con el Gobierno de Cantabria para desarrollar las actuaciones arqueológicas y, si como públicamente han dicho el Consejero y el director general de Cultura, Altamira es territorio de Cantabria y por lo tanto el desarrollo de actuaciones arqueológicas en la cueva de Altamira debe ajustarse a lo establecido en la Ley de Patrimonio Cultural de Cantabria, es decir se debe solicitar autorización a la Consejería de Cultura para realizar cualquier tipo de actuación arqueológica en el interior de la cavidad y en el entorno de la misma.
El Consejero de Cultura está obligado a informar sobre las conclusiones del informe jurídico que, él mismo ha anunciado, se ha encargado en relación a la legalidad o ilegalidad de las actuaciones arqueológicas desarrolladas en Altamira.
Y además, y esto es mucho más importante, conocer si el Sr. Consejero de Cultura sigue defendiendo que aplicar la Ley de Patrimonio Cultural de Cantabria con imparcial rigor es una obligación perentoria del Gobierno, como así lo puso de manifiesto el 12 de junio del año 2008 cuando públicamente cuestionó la labor desarrollada por una parte de los directores de las actuaciones arqueológicas realizadas en territorio cántabro, a quienes advirtió de que la administración contaba con un código sancionador para casos de ligereza administrativa, por no entregar las memorias científicas en tiempo y forma.
Evidentemente, irregularidad de menor entidad y proyección que lo acontecido en la cueva de Altamira, si realmente las excavaciones arqueológicas realizadas en Altamira suponen un perjuicio real para la conservación de las pinturas y éstas han sido desaconsejadas por el CSIC.
Consideramos que este asunto es de medular importancia, porque estamos hablando de la conservación de un icono universal, de un referente artístico de primera magnitud, y como tal merece una respuesta contundente por parte del Gobierno de Cantabria.
No se puede encender la hoguera y esperar irresponsablemente a que la apague el viento.
No se puede acusar a los responsables de la dirección de Altamira de actuar al margen de la ley y después guardar un silencio cómplice.
FOTOGRAFÍA EN ALTA RESOLUCIÓN 1
FOTOGRAFÍA EN ALTA RESOLUCIÓN 2
FOTOGRAFÍA EN ALTA RESOLUCIÓN 3