Se trata de una iniciativa que, según el presidente del PP cántabro, Ignacio Diego, "tiene una enorme trascendencia en una situación de crisis, de ausencia de liquidez, y que va resolver un problema que se experimenta en una gran parte de pequeñas empresas y de autónomos".
La diputada por Cantabria, Ana Madrazo, explicó que la falta de liquidez de los pequeños y medianos empresarios ha tenido como consecuencia que la Agencia Tributaria tenga un enorme volumen de deuda pendiente de cobro que asciende a 11.600 millones de euros. Por su parte, las administraciones públicas deben a los pequeños y medianos empresarios, así como a los autónomos, más de 30.000 millones de euros.
La solución no era otra que estas empresas pudieran compensar las deudas tributarias con lo que, a su vez, les deben las administraciones.
Pero no todos los grupos políticos con representación en el Congreso se mostraron de acuerdo. El Partido Socialista se opuso, mientras que los nacionalistas no vieron con buenos ojos meter en el mismo saco a las comunidades autónomas. Hubo que llegar a un acuerdo para que la iniciativa saliera adelante y, al final, el Partido Popular aceptó que sólo la Administración central se haga cargo de esas compensaciones.
Pese a ello, Madrazo anunció que su formación política continuará trabajando para que "se amplíe la posibilidad de compensar también las deudas de otras administraciones públicas, como autonomías y ayuntamientos".
Para concluir, la diputado por Cantabria del PP dijo que "se ha dado un primer paso para que estas empresas tengan un desahogo financiero", ya que han visto caer sus ventas, tardan mucho tiempo en cobrar las facturas de las administraciones públicas y tampoco los bancos les conceden créditos.