Como "un ejemplo de muchos a los que se puede recurrir para demostrarlo", la dirigente popular se refirió a la reciente paralización de las obras del Ministerio de Fomento. "Nuestra comunidad ha sido la más perjudicada de toda España por el recorte inversor de Fomento. Ese sí ha sido un agravio imperdonable y un desprecio en toda regla hacia nuestra región".
Sáenz de Buruaga continuó diciendo que "a Cantabria se le ha llegado a despreciar de manera injusta y altanera por su tamaño y número de habitantes, despreciando al mismo tiempo el principio de que en España todos somos iguales y deberíamos tener los mismos derechos, ya seamos altos o bajos, rubios o morenos".
En opinión de la secretaria autonómica del PP, "todos esos agravios y desprecios son los que realmente deberían indignar al presidente del Gobierno y no si está sentado o de pie en un acto académico, porque la paralización de esas obras tiene una incidencia muy directa sobre la economía de nuestra comunidad y, por lo tanto, sobre la calidad de vida de sus ciudadanos".
"Por supuesto que el Partido Popular considera que el presidente debe sentarse donde le corresponda, pero también entiende que sería propio de un presidente de Cantabria y de quien lidera un partido regionalista, sentirse muy agraviado cuando se pisotean los derechos de nuestra tierra y cuando sus ciudadanos son objeto de injusticias", subrayó Sáenz de Buruaga, quien añadió que "en esos casos es cuando debería identificarse de verdad con Cantabria y no sólo en cuestiones de mero orden protocolario".
Para la dirigente regional del PP, "el señor Revilla está dando muestras de que tiene las prioridades muy claras: primero él, después él y luego él". Al respecto añadió que "esa es la manera que tiene de entender el cargo que ocupa y la responsabilidad que desempeña".
Sáenz de Buruaga opinó que el presidente del Ejecutivo regional "debería mantener vivo el debate sobre las infraestructuras de comunicación, sobre las obras paralizadas por el ministro de Fomento o hablar de la crisis económica y sus negativos efectos sobre el empleo, cosa que no hace, en vez de dedicarse a generar debates ficticios que en nada benefician a los cántabros para tratar de desviar la atención de lo realmente importante".
"Esperemos que el señor Revilla entienda ahora cómo se sienten los alcaldes que representan a sus municipios, cuando él hace una visita a esos ayuntamientos y ni si quiera les avisa" señaló la secretaria autonómica del PP.
Para concluir consideró que "el resto de los españoles debería quitarse el sombrero ante la paciencia infinita que están demostrando los cántabros frente a quien les agravia y a quien consiente esos agravios: el señor Rodríguez Zapatero y su aliado incondicional en Cantabria el señor Revilla".