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Perder la cabeza y la decencia

Artículo de opinión publicado por Eduardo Van den Eynde, coordinador de Comunicación del Partido Popular, en www.claudioacebo.com


La relación de contratos menores de la Consejería de Gorostiaga del primer trimestre del año es una relación de gastos sorprendente e indignante a partes iguales.

Hay que tener valor para presentar esos gastos a la opinión pública la misma semana que Rodríguez Zapatero nos anuncia que se congelan las pensiones, se baja el sueldo a los empleados públicos o se eliminan las subvenciones a la natalidad y, por tanto, a la conciliación de la vida familiar y laboral.

Si estos gastos no tienen un pase en ninguna coyuntura, en la actual, cuando se clama a voces por la necesidad de recortar los gastos de las administraciones, y cuando se anuncian unos recortes sociales que no tienen precedentes en nuestra historia democrática, es simplemente intolerable.

A nuestro partido han llamado muchas personas que conocían este listado mostrando su monumental cabreo, y es nuestra obligación que la gente, al menos, sepa a dónde se destina una buena parte de ese dinerillo que le quitan de la nómina o de la pensión del abuelo.

El riesgo de estas cosas es que hay quien piensa que son anécdotas, pero son tantas anécdotas que, sumadas en su totalidad, constituyen un disparate, un abuso y casi una afrenta.

Es moralmente inaceptable que el gobierno llame a la solidaridad de los más débiles, a la comprensión de los recortes en aras a la viabilidad de nuestras cuentas públicas, cuando se ve a qué clase de gastos se destinan sus dineros.

Estoy seguro que tendré que escuchar, de nuevo, que estas denuncias "desprestigian" la actividad política. Yo soy de la opinión que lo que desprestigia de verdad la actividad política es esta forma de gobernar, porque al final la gente nos mete a todos en el mismo saco, lo que es sumamente injusto.

Leer el otro día a nuestro Consejero Agudo cómo justificaba el gasto en invitar a copas a la muchachada por parte de nuestro ínclito Director General de Asuntos Europeos diciendo que "también en época de crisis la gente tiene que divertirse" es de nota.

En época de crisis,- y en las épocas boyantes también-, el dinero público no está para invitar a copas. Las copas se las paga uno de lo suyo, como hace todo el mundo, y si cobras una generosísimo sueldo de los impuestos de los ciudadanos, muchísimo más.

Hemos pasado del "gratis total y no gasto ni en tabaco" de muchos de nuestros cargos públicos, al "gratis total y aquí estoy yo que pago unas rondas para todos, porque yo lo valgo, soy superguay y tengo una VISA con dinero que no es de nadie".

Todo un ejemplo de liderazgo moral para la sociedad.

Para muestra, un botón: entre tres directores generales de la Consejería de Dolores Gorostiaga (por tanto, con su beneplácito) se han gastado, en el primer trimestre del año, casi 30.000 euros (más de 6.000.000 de pesetas) en alquiler de coches con chofer.

Tengo ganas de escuchas las explicaciones, porque estos señores tienen a su disposición chofer y coche del parque móvil del Gobierno (que lo pagamos todos), con lo que nadie acaba de entender cómo pueden gastarse esa barbaridad en tres meses, contratando coches y chóferes de empresas externas.

Mientras tanto, tráfico reduce los controles de alcoholemia porque no tiene para trompetillas desechables y manda a las patrullas de la Guardia Civil que cierren las ventanillas y se cuezan al sol para ganar coeficiente aerodinámico y gastar menos gasolina.

Yo creo que algunos han perdido la cabeza, y, lo que es peor, la decencia.

 

Artículo de opinión publicado el 19 de mayo de 2010 en www.claudioacebo.com

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