Partido Popular en Cantabria

Impuesto de Sucesiones

El diputado regional hizo una especial referencia al Impuesto de Sucesiones y recordó que "desde el 1 de enero de 2003, y a iniciativa de un gobierno de coalición PP-PRC, este impuesto está prácticamente abolido en las transmisiones por muerte en los casos de parentesco en primer grado, es decir entre cónyuges, ascendientes y descendientes".

"Consideramos este impuesto totalmente injusto, puesto que lo que grava es el ahorro familiar. Los motivos para ahorrar suelen ser mejorar la propia situación futura cuando llegue la jubilación, y con ella la merma de ingresos, y en su caso poder transmitir un patrimonio a los hijos, no hacer heredero a la Administración regional", aseveró Julio Bartolomé.

En este sentido, Bartolomé señaló que "resulta especialmente perjudicada la clase media, que como siempre es la que soporta el andamiaje social, como hemos comprobado con varios ejemplos de liquidación, antes y después de la reforma prevista, sobre porciones hereditarias que van desde los 100.000 a los 400.000 euros, cantidades hoy fácilmente alcanzables con las valoraciones oficiales".

Por otra parte, según el diputado del PP, "el impuesto de sucesiones tiene múltiples efectos negativos por retraer actitudes orientadas a la creación de riqueza y, especialmente, por el efecto frontera que puede afectar en un doble sentido, cambios de domiciliación de actuales residentes en Cantabria y estímulo negativo a la domiciliación de los muchos residentes que figuran empadronados en otros lugares". "No es sólo el caso más obvio del País Vasco, pues también en Castilla y León y en Madrid son más favorables las condiciones de este impuesto", subrayó Bartolomé.

Julio Bartolomé concluyó señalando que "en nuestro Proyecto de Ley alternativa se han mantenido algunas de las reformas en sentido favorable en impuestos como Donaciones y Transmisiones".