Diego señaló que este diálogo seguiría "de alguna manera lo sugerido por el propio presidente del Gobierno central, el señor Rodríguez Zapatero, quien recientemente ha explicitado la necesidad de alcanzar acuerdos a nivel nacional en el marco de dos ámbitos fundamentales para el desarrollo de cualquier Estado, que son la educación y la energía".
Al respecto, el presidente de los populares cántabros recordó que su partido ya propuso en su día al Gobierno regional un proyecto de ley de Educación para ser negociado a través del diálogo y que "el Gobierno, de la mano del señor Revilla, despreció y se negó a dialogar" sobre él.
Sin embargo y pese a tales antecedentes, Diego expresó su confianza en que el Gobierno "ahora abra el diálogo al menos en torno a la energía" y se consiga un nuevo plan "que sea consensuado, acordado por todos los representantes políticos de la región, así como un plan que garantice principios de transparencia, de rigor y de participación de la sociedad de Cantabria".
El presidente del PP cántabro, quien consideró que el plan elaborado en 2006 por el Gobierno ha sido un "fracaso evidente y difícilmente discutible", reiteró su oposición al concurso eólico calificándolo como de "atropello", si bien insistió en que el Partido Popular "se manifiesta favorable al impulso de las energías renovables".
En su opinión, cuando el Gobierno aprobó el plan energético en 2006 lo hizo en una clara muestra, además intencionada, de obviar la participación pública reglada", algo que para Diego constituye una actitud bien diferente a la mantenida por los gobiernos socialistas de la Junta de Andalucía o del País Vasco.