Asimismo, María Antonia Cortabitarte, puso en duda el último anuncio del presidente regional sobre las dos posibles empresas interesadas en GFB. "Nos gustaría creerlo pero es imposible porque ya nos han hecho muchos anuncios sobre nuevos inversores en GBF y nunca se cumple nada de lo que dicen. Llevan, hace más de un año buscando nuevos inversores y no le encuentran... porque ¿quién se va a querer hacer cargo del pozo de deudas que hay en GFB?", cuestionó la diputada.
La portavoz de Industria pidió la asunción de responsabilidades por parte del presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y del Consejero de Economía, Ángel Agudo.
TEXTO DE LA RUEDA DE PRENSA :
Como saben ayer se conoció la noticia de que el Consejo de Administración de GFB ha procedido al cese de la actividad y a la extinción de los contratos de los trabajadores. Una triste y lamentable noticia que suponemos habrá caído como un bombazo sobre esas 77 familias que dependen de esta fábrica y que hasta ayer tenían la esperanza de que el Gobierno salvara esa situación.
Nosotros la verdad poca o ninguna esperanza teníamos en que el Gobierno arreglara algo porque llevan muchos meses diciendo que las cosas se iban a solucionar y como vemos todo va de mal en peor en GFB.
El lunes como saben el Presidente del Gobierno en el Parlamento habló de GFB a instancia de una pregunta del Presidente del PP, pero no informó de lo que iba a suceder solo 2 días después (la extinción de los contratos y el cese de la actividad). De eso no dijo ni palabra sabiendo como sabía que era inminente la extinción de los contratos, sino que se limitó a echar la culpa al PP y a decir falsedades.
Dijo el lunes el Sr. Revilla en el Pleno: esa empresa no es del Gobierno de Cantabria. Primera falsedad. El presidente del gobierno en una situación tan delicada no puede seguir jugando a mentir ni a los ciudadanos ni a los trabajadores.
El 30 % de esa empresa es del Gobierno de Cantabria a través de SODERCAN. De hecho los Vicepresidentes de GFB han sido los Consejeros de Industria del Gobierno de Cantabria.
Decía también muy airado el Presidente: "Nosotros no hemos comprado nada, ni la maquinaria esa ni nada, no hemos comprado absolutamente nada". ¿Cómo se atreve a decir esto?. No sólo han comprado una maquinaria por la que pagaron 44 millones de euros sin que nadie la peritara, que esto ya por sí solo es vergonzoso, pagar 44 millones de euros por algo que nadie ha peritado, es que además la compraron sin garantías porque habían caducado, era una maquinaria vieja porque cuando la compraron ya llevaba años parada y almacenada en el puerto alemán de Bremen, por lo que ahora no tiene condiciones para competir en el mercado, porque esa maquinaria tiene ahora al menos 9 años de vida.
Y todas estas cosas no las dice sólo el PP, que las hemos dicho y muchas veces, es que lo dicen los administradores concursales en su informe. Por tanto escuchar al Sr. Revilla esas falsedades resulta indignante.
¿Cómo tendrá el valor de querer seguir engañando a los ciudadanos con la que tiene encima con GFB?
El lunes también nos dijo que había dos empresas interesadas. Nos gustaría creerlo pero es imposible porque ya nos han hecho muchos anuncios sobre nuevos inversores en GBF y nunca se cumple nada de lo que dicen. Llevan, hace más de un año buscando nuevos inversores y no le encuentran... porque ¿quién se va a querer hacer cargo del pozo de deudas que hay en GFB?
El lunes Revilla no quiso decir a los trabajadores a la cara lo que les iba a pasar 2 días después porque les tenía allí en la puerta del Parlamento y no les dijo nada.
Sigue jugando con su situación y no ha tenido ni la más mínima muestra de preocupación con ellos, ni siquiera se ha molestado en recibirlos y eso que llevan más de un año solicitándolo. Con todas las veces que ha alardeado de que él siempre tendría su puerta abierta.
Pero es que Revilla no quiere dar la cara en GFB. Se esconde.
Después de enterrar ahí más de 36 Millones de euros de todos los cántabros. Ahora se esconde. Pero no se lo vamos a permitir le vamos a exigir que de la cara ya que él es el máximo responsable de todo lo que ahí ha ocurrido porque ha consentido que el Consejero de Economía, Sr. Agudo, cometiera todos los desmanes y todas las irregularidades que ha cometido en GFB.
Agudo ha sido el cerebro de GFB y si tuviera algo de vergüenza política tendría que haber dimitido por este escándalo hace tiempo. Pero en este Gobierno todo vale ni él se ha ido ni Revilla le ha cesado, cosa que tenía que haber hecho hace mucho. Mucho antes de llegar a esta situación de la que Agudo es autor, cómplice y encubridor porque ha sido miembro del Consejo de Administración de GFB desde el primer día y ha aprobado todas las decisiones que se han tomado allí.
La situación a la que ha llegado GFB se veía venir hace tiempo aunque el gobierno negara en este Parlamento que existieran problemas. Se veía venir por el cúmulo de irregularidades que se estaban cometiendo allí.
Voy a hacer un pequeño recordatorio de las irregularidades más importantes que ha cometido el Gobierno y que han hecho que esto haya acabado en esta situación.
La 1ª irregularidad comienza cuando el Sr. Revilla firma el protocolo en Costa Rica para embarcarse en este proyecto empresarial sin tener informes técnicos claros y contundentes que avalen la viabilidad del proyecto. Es más, los únicos informes técnicos que existían ponían en duda la viabilidad del proyecto.
La siguiente irregularidad la cometen los miembros del Gobierno en el Consejo de Administración de GFB ( el cerebro de la operación el Sr. Agudo y el entonces Consejero de Industria) que modifican todas las modificaciones del protocolo, y todas esas modificaciones fueron en beneficio de los socios y en perjuicio de los intereses de Cantabria.
Después esos mismos miembros del gobierno en GFB consienten que el socio no aportara la maquinaria (tal como era el acuerdo) sino que se la vende a la nueva sociedad y cobra por ella 44 millones de euros. Cuando a ellos les había costado mucho menos : 35,6 millones de dólares. 23 millones de ellos van a la sociedad ¿y el resto a los bolsillos del socio costarricense. onsintieron que se pagaran 44 millones de euros por una maquinaria que no se peritó. Una maquinaria que al día de hoy está incompleta y que ha habido que hacerlas profundas adaptaciones. Y se pagaron 44 millones de euros.
La ejecución del proyecto según el protocolo dependía de la presentación de un Plan de Viabilidad y el Gobierno consintió en que se siguiera con todo adelante sin presentarse ningún Plan de Viabilidad.
El Sr. Agudo conocía y ha consentido desde el Consejo de Administración un incremento del coste del proyecto que inicialmente era de 60 millones y que se incrementara a más de 100 millones de euros y está sin acabar. El Sr. Agudo ha consentido que se fueran acumulando y acumulando deudas, con bancos, con proveedores, con la seguridad social. Y mientras todo eso lo sabían el Sr. Agudo y los entonces Consejeros de industria, el Gobierno cada vez hacía más desembolsos de dinero y cada vez avalaba préstamos (hasta llegar a los 36 millones de euros).
Estas y muchas otras cuestiones son las que se tienen que aclarar en una comisión de investigación que se debatirá en el Pleno del lunes. Veremos a ver si el Sr. Revilla tiene el valor de dar la cara el lunes.
Estamos convencidos que no se va a atrever a hablar porque solo sale a hablar de GFB cuando no le queda más remedio por el Reglamento que es en la pregunta mensual al Presidente que dura 5 minutos. Sólo habla ahí.
El lunes que tiene tiempo para explayarse seguro que no da la cara.
En junio del año pasado, cuando las cosas todavía no estaban tan negras. También propusimos una comisión de investigación para aclarar las irregularidades, para tratar de conocer la situación real de aquel momento e intentar buscar una solución. Se nos denegó
Ni el Gobierno ni los grupos que lo apoyan aprobaron nuestra propuesta y aseguraban encarecidamente que no había nada que investigar, que no había ninguna irregularidad y que en Septiembre de 2008 GFB se ponía en funcionamiento.
Hoy un año después las cosas están mucho peor. Los 77 trabajadores se quedan en la calle. Hay una lista de deudas interminables. Y hay más de 36 millones de euros de dinero públicos ahí enterrados.
Mientras tanto el cerebro de todo esto sigue paseando tranquilamente el maletín de Consejero de Economía y sigue manejando el dinero de todos los cántabros. Es vergonzoso.
Con el dinero público no se juega. El Consejero de Economía que tenemos ha jugado con más de 36 millones de euros y los ha perdido. ¿Quién nos los va a devolver? Y mientras todo esto pasaba el Sr. Revilla lo consentía todo de romería en romería y de fiesta en fiesta. Los dos se tienen que dar la mano y marcharse para casa porque han defraudado el dinero de los cántabros.
