TEXTO DE LA RUEDA DE PRENSA:
Gracias a todos por acudir a esta rueda de prensa, que convocamos desde el Partido Popular para exigir al Gobierno de Cantabria que, de forma inmediata, remita a este Parlamento toda la documentación relativa a las dietas y comidas que los altos cargos del Gobierno tienen. Documentación que ha superado, con creces ya, el plazo que el Reglamento determina para su remisión.
Los hechos son los siguientes. El pasado día 15 de julio el Grupo Popular presenta dos iniciativas de petición de documentación que leo textualmente.
"Copia de todos los gastos en concepto de dietas de todos los Altos Cargos del Gobierno de Cantabria, o de los directores de los OOAA, entidades públicas empresariales o de los directivos de las empresas públicas de Cantabria especificando el motivo de cada gasto"
"Copia de todas las facturas en concepto de comidas de cualquier alto cargo del Gobierno de Cantabria, o de los directores de los OOAA, entidades públicas empresariales o de los directivos de las empresas públicas de Cantabria especificando comensales y motivo de la reunión"
El plazo para que el Gobierno contestara estas preguntas finaliza el día 17 de agosto, y a día de hoy todavía el Gobierno no las ha contestado.
Ni ha remitido la documentación, ni nos ha dicho por qué no remite la documentación, como prevé el Reglamento ni nos ha permitido acceder a las dependencias del Gobierno para poder consultar esta información como también permite el Reglamento.
Por lo tanto, estamos ante una caso concreto más de falta de transparencia del Gobierno, de ocultación de información, en una clara actuación de falta de respeto a este Parlamento, al derecho de los diputados, a nuestro trabajo como diputados y como oposición, atentando contra lo que representamos que es nada más y nada menos que los ciudadanos de Cantabria.
El caso de las dietas y los gastos en comidas, facturas de restaurantes y todo lo que solicitamos, es un ejemplo más de la forma de actuar del Gobierno obstinado en la ocultación y anquilosado en las más profundas costumbres antidemocráticas, ya que el trabajo de la oposición y el control al Gobierno es uno de los pilares básicos en un estado democrático de derecho como el que vivimos.
Y digo que es un caso más porque el Gobierno acumula retrasos de más de 2 años, algunos de agosto de 2007, en contestar a nuestras peticiones de documentación y preguntas.
Por no recordar casos como en el que se nos contesta que las empresas públicas o el Gobierno se ha gastado en Juvecant lo que han estimado oportuno gastar, respuesta mezquina y descarada propia de pasar a engrosar el record guinness de un Gobierno que trata a este Parlamento y sus diputados de manera despótica.
O los meses que llevamos esperando a que se remita la información sobre el Soplao con la que está cayendo y con lo que serviría a más de uno para lavar por lo menos su imagen de que tiene mucho que ocultar.
O los tan oídos casos en los que no se nos permite conocer, que llevamos pidiendo desde hace 5 años y no se nos remiten, los libros mayores de las empresas públicas, instrumento al servicio del Gobierno para ser los héroes del derroche y la ocultación,
Falta de remisión de los libros mayores que tiene como fin ocultar lo que los directivos y altos cargos de este Gobierno se comen con el dinero de los cántabros o lo que gastan en visas, viajes, y otros conceptos varios.
Por ejemplo el caso de los libros de la sociedad regional de turismo, solicitados por el PP desde el año 2007, con contestación por parte del Gobierno diciendo en febrero de 2008 que debido a que no se pueden fotocopiar porque se estropearían, están a disposición de la señora diputada solicitante en la sede social; y desde el 2 de febrero del año 2008 a día de hoy, es decir, más de año y medio, los servicios de la cámara han intentado sin éxito que los responsables de esta empresa pública permitan la entrada de los diputados del PP a consultar esos libros.
Qué suerte la de aquellos cargos públicos que están en la oposición y que no sólo se les remite la información sino que además se pone a su disposición las facturas, tickets y comprobantes para que sepan los gastos y puedan gozar en plenitud de la democracia y de la actuación de un gobierno transparente y que no tiene nada que ocultar...
Qué suerte la de esos cargos políticos, pero qué pena dan cuando actúan con tanta hipocresía y poca seriedad; porque lo que está bien para ellos, tenían que defender que esté bien para los demás, y porque cuando exigen transparencia y limpieza a los demás tenían que exigirla también a los suyos.
Ya sabrán que me estoy refiriendo a los miembros de la oposición en el Ayuntamiento de Santander, que piden y exigen a voz en grito información y ver facturas, pero no utilizan lo mismo con los inquilinos de Bonifaz que pasan sus días en Peña Herbosa.
La hipocresía en política no cabe, la falta de dignidad en política y en este caso es ruin, y los cargos públicos del PSOE han mostrado una doble cara como dignos protagonistas de la película "las dos caras de la verdad".
Porque esa es la verdad de todo. Ante un gobierno municipal transparente, como han demostrado ser los miembros del PP que dirigen el Ayuntamiento de Santander, que no solo les han dado la información, sino que ha podido acceder a revisar factura por factura, ticket por ticket de metro y de taxi, callan, pliegan velas y defienden a un Gobierno regional caracterizado por el oscurantismo, la ocultación y la opacidad.
Y no solo el Gobierno, sino que sus "compañeros" y lo pueden poner entre comillas, en este Parlamento han votado en varias ocasiones en contra de que se remita la información a los diputados, la última vez con toda la información relativa al El Soplao, que el PP lleva pidiendo desde hace más de dos años.
Por lo tanto, exigimos desde el Partido Popular al Gobierno que abandone esa actitud de indolencia y desprecio a este Parlamento y a los diputados, y que remita de forma inmediata toda la documentación solicitada hace más de dos meses sobre las dietas y gastos del Gobierno de Cantabria, y que en un alarde de actitud democrática cumpla con este Parlamento respecto a todas esas iniciativas que llevan hasta dos años metidas en un cajón y que no tienen contestación.