De esta forma, Diego también ve "corrupción" en un "atentado moral del tamaño de este caso", y pidió que se "juzgue" el "ilícito moral", marcado por una "ausencia absoluta de moralidad".
"Para mí es corrupción, clara corrupción", sentenció, por lo que subrayó que, al referirse a un "delito moral", que además está documentado y argumentado, "no hay presunción de inocencia que valga", sino, al contrario, "certeza de culpabilidad".
Según señaló, se ha encargado a expertos jurídicos que analicen el expediente, del que destacó la contratación "a dedo" y "a un amigo" del alquiler, por lo que no se descarta llevar el caso a los tribunales. "Es clarísimo que se puede llevar a la vía judicial", aseveró.
No obstante, al margen del camino legal, el presidente de los 'populares' insiste en que la sociedad cántabra "no debe dejar pasar sin más" un asunto por el que debe llegar un momento en que "se diga basta".
Diego sostuvo que "la sociedad de Cantabria exige al Gobierno la asunción de responsabilidades políticas". El PP, que seguirá llevando este tema al Parlamento cántabro, reclamó la dimisión de los "responsables", apuntó.
En este sentido, tras recordar que el consejero de Cultura, Turismo y Deporte es "responsable" de "meter en el bolsillo" de Perojo el dinero del alquiler, el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, también lo es, al ser "responsable directo y máximo de todo lo que ocurre en Cantabria".
El presidente del PP también tildó al presidente de "cómplice", porque "beneficia a un compañero de partido", y le reprochó que mintiera, "una vez más", en la tribuna del Parlamento de Cantabria durante su última intervención.
TRAMITACIÓN
Diego subrayó que ya desde el año 2005, la "única oferta" que ha tenido Cultura para albergar parte de los fondos del Museo de Prehistoria fue la de Perojo, frente a las afirmaciones de Revilla de que se buscaron más.
El presidente del PP explicó que así consta en el expediente completo del alquiler, recibido en el Parlamento de Cantabria a petición de su grupo, y en el que "no hay ninguna oferta, salvo la de Perojo".
Se trata de un expediente que tildó de "chapuza" y que es "bastante pobre", al apoyarse en una "argumentación débil" para "favorecer a un amigo", o "vestir administrativamente un ilícito moral con argumentación endeble".
El dirigente 'popular' facilitó a los medios documentación relacionada con el expediente, como el informe de la Dirección General de Cultura, fechado en enero de 2006, en el que se señalaba que el arrendamiento del local era la "única solución" que permite liberar el espacio que ocupaba hasta la fecha, en los bajos de la antigua sede del Gobierno de Cantabria, que debe derribarse para la próxima construcción del nuevo edificio diseñado por Rafael Moneo.
No obstante, se remitió a que aún no han comenzado las obras de adecuación del inmueble de Los Castros para descartar la urgencia de las mismas, con las que aseguró que se justificó hace tres años, en base a una de las posibilidades que contempla la ley para la adjudicación directa con la que "soslayar" el concurso.
Diego también recordó que el procedimiento se inició mientras el consejero de Cultura, Francisco Javier López Marcano, afirmaba públicamente buscar locales céntricos y accesibles, llegándose a apuntar a la calle Gravina, donde se ubica el Archivo regional, después de que este espacio quedará liberado cuando se trasladen los fondos al edificio de Tabacalera, en Marqués de la Hermida, construido pero que aún no está en servicio.
Asimismo, incidió en que, según los expertos, "fraccionar" el museo --ya que en el local de Los Castros se ubicarán parte de los fondos--, es "inconveniente", y que trasladar las piezas "más de una vez" --la ubicación en este local es temporal hasta que se construya el Museo de Cantabria-- "es absolutamente inconveniente".
Diego reiteró que el local costó 300.000 euros, y que las obras para mejorarlo se han adjudicado en 1,4 millones de euros, mientras que los costes del alquiler por el período en que dura el contrato ascienden a 779.000 euros.
Por el contrario, señaló que el edificio de Tabacalera, donde el PP propone llevar estos fondos, no se "sabe con qué llenarlo", y además "es gratis".
EUROPA PRESS
