Diego recalcó que el consenso alcanzado entre el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, y el Grupo Municipal Regionalista para la aprobación de los presupuestos municipales "pone en evidencia" que en Cantabria hay dos formas "bien distintas de gobernar".
Por un lado, destacó que hay una forma de gobernar "profundamente democrática, participativa y responsable", que es la que ejecuta el PP; y por otro, una forma de gobierno "acomplejada, sectaria y con un gran déficit democrático" que es la que representa el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, y su Gobierno.
Ha quedado de relieve que, mientras Santander cuenta con "un gran alcalde" que trabaja por todos los ciudadanos, Cantabria tiene un presidente "pequeño y mezquino que trabaja exclusivamente por intereses propios y por los de su círculo más próximo".
Para Diego, lo sucedido en el Ayuntamiento de Santander deja claro que el acuerdo no es una cuestión de "aritmética", sino de "ética", porque el PP cuenta con mayoría absoluta en la Corporación para sacar adelante los presupuestos de 2009, pero es consciente de que en el actual momento económico "el mejor camino es el del esfuerzo conjunto, la suma de voluntades, el diálogo y el pacto".
Por ello, el líder de los 'populares' en la región invitó a los cántabros a la "reflexión", para que comparen esas formas diferentes de ejercer el Gobierno: la del PP, que se demuestra "por la vía de los hechos"; y la del pacto PRC-PSOE, "menos abierta, menos democrática y menos positiva para los ciudadanos".
El presidente del PP cántabro destacó que el acuerdo ofrecido por el alcalde de Santander es un "ejercicio de profunda demostración de democracia" que "contrasta" con el "sectarismo cegato e irresponsable de un Gobierno regional" marcado por sus "propios complejos" debidos al hecho de tener una "mayoría artificial formada por la suma de los perdedores" de las elecciones.
Hoy los regionalistas de Santander se felicitan de tener un alcalde "abierto al diálogo", que ha evitado el "rodillo, demostrando cómo se ejerce el Gobierno cuando se es demócrata de puertas para adentro", recalcó Diego.
En cambio, lamentó que en Cantabria el PP ha promovido el diálogo y propuesto pactos "hasta el aburrimiento" y el Gobierno se ha negado a escucharle hasta llegar al "absurdo" de que un consejero diga que es "contra natura" pactar con la oposición cuando se tiene mayoría suficiente, un consejero del mismo signo político de quienes se felicitan por el acuerdo en Santander.
Además, criticó que el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, tiene una actitud "intolerante, llena de complejos y con un grave déficit democrático que muestra día a día despreciando el diálogo con el partido que representa" a más ciudadanos de la región.
En este sentido, Diego aseguró que Revilla, cada vez que llegan las elecciones, "clama contra las mayorías absolutas", y luego, sin embargo, "aplica el rodillo a todo aquello que procede de los que no le apoyan y desprecia una y otra vez la mano tendida" del PP.
"Lo único que teme Revilla de las mayorías es que le dejen a él fuera del sillón que tanto le gusta y ejerce de manera tan irresponsable. Las mayorías democráticas, cuando son democráticas, saben alcanzar el máximo consenso. Y quienes confunden democracia con populismo hacen de la exclusión y el partidismo su bandera", apostilló.
