Partido Popular en Cantabria

La secretaria general del Partido Popular de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, consideró hoy "esperpénticas" las acusaciones de Miguel Ángel Revilla y Dolores Gorostiaga a la principal fuerza de oposición, y a su vez les dijo que "carece de ética política el Gobierno que dedica la mañana de un domingo a hablar de los pequeños problemas que afectan a sus relaciones partidistas, en vez de hablar de los graves problemas que afectan a los cántabros a causa de la crisis económica". "Hoy Revilla y Gorostiaga se han retratado como dos políticos sólo interesados en sus posiciones de poder personales, porque está claro que el bienestar de los ciudadanos les importa un rábano", dijo la secretaria general.

Sáenz de Buruaga exigió a Revilla y Gorostiaga "que afronten la crisis económica, que elaboren un plan anticrisis como les ha pedido Ignacio Diego, y que busquen consenso con las fuerzas políticas y sociales". "El Partido Popular se ofreció generosamente a pactar el presupuesto de 2009 y nos despreciaron la mano tendida, incluso con insultos. Lo mismo ha ocurrido con el proyecto de ley de Educación. Estamos ante un Gobierno ineficaz, derrochador y prepotente, que en vez de corregirse, cada día va más a la deriva, y con él toda la comunidad autónoma".

La secretaria general dijo que Revilla "está más preocupado de los cuatro regionalistas que le desobedecen que de los 31.000 desempleados de Cantabria", y que Gorostiaga "hace cada vez más hondo el hoyo donde está metiendo al PSOE, aunque en el Partido Popular tenermos que agradecérselo, porque nos está permitiendo situarnos en posiciones de muy probable mayoría absoluta de cara a 2011".

Sáenz de Buruaga señaló que el PP "no tiene ninguna culpa de que el PRC haya tomado el pelo a los socialistas en los pactos municipales en casi toda Cantabria". "Que el PRC sea hoy un partido caótico y sin programa político, eso es asunto exclusivo de Revilla, quien además consiente que en Marina de Cudeyo su partido esté gobernando con un tránsfuga y mire para otro lado", indicó. "Cuando un proyecto como el revillista se fundamenta en intereses personales, luego no hay que extrañarse de que se rompa cuando esos intereses entran en conflicto, como estamos viendo en muchos logares de Cantabria. Para el revillismo, la palabra ética es sinónima de sillón", concluyó.