El diputado regional del Partido Popular y portavoz en materia de Empleo, Lorenzo Vidal de la Peña, ha expresado su preocupación por la existencia de "indicadores alarmantes" en los datos sobre el paro en Cantabria, correspondientes al mes de diciembre, dados a conocer hoy por el Ministerio de de Trabajo y Economía Social.
En este sentido, Vidal de la Peña ha destacado el incremento del desempleo que se ha producido en todos los sectores menos en servicios, lo que supone en su opinión “que Cantabria ha comenzado a cumplir la condena que le ha impuesto el Gobierno de Revilla: convertirse en una comunidad dedicada a la hostelería”.
"Después de cuatro meses perdiendo afiliados a la Seguridad Social y con 600 contratos menos firmados que el mes anterior, Cantabria cierra diciembre con 137 personas más en desempleo que en noviembre y de nuevo el paro sube en la comunidad mientras baja en España", ha lamentado.
Para el parlamentario regional del PP, estos datos "evidencian el fracaso de unas políticas industriales que se resumen en que el consejero se dedica a visitar empresas para hacerse fotos en ellas”.
Vidal de la Peña ha opinado que “en vez de hablarles a los niños del Rey Emérito, el presidente Miguel Ángel Revilla debería explicarles en qué van a trabajar sus padres y madres si quieren seguir viviendo en esta comunidad”.
"La radiografía de la contratación pone de manifiesto que hasta la reforma laboral fake pasa de largo por Cantabria”, ha afirmado Vidal de la Peña quien al respecto ha añadido que "se han firmado en el año que acaba de terminar 5.184 contratos menos que en 2021 y de ellos, solo el 20% son indefinidos".
Para Vidal de la Peña, esto demuestra que “la situación del empleo en Cantabria ya no se oculta ni con el maquillaje de una reforma laboral que tiene la desvergüenza de llamar ocupados a los que están cobrando el paro o buscando empleo”.
“Los cántabros tienen que empezar a preguntarle a Miguel Ángel Revilla qué va bien en Cantabria, por qué es optimista, de qué se ríe. Porque este puede ser el año en el que los cántabros se pongan de acuerdo en que el presidente y su Gobierno se ríen de nosotros”, ha concluido.