Partido Popular en Cantabria

Según explicó la diputada regional del PP, María José Sáenz de Buruaga, pese a que el Estatuto Marco declara la jubilación forzosa a los 65 años, autoriza la prórroga de la actividad profesional hasta los 70 en función de las necesidades de la organización. Sin embargo, añadió, "el Gobierno de Cantabria, escudándose en un mal llamado Plan de Ordenación de Recursos Humanos, pretende imponer y generalizar la jubilación obligatoria e improrrogable a todos sus facultativos mayores de 65 años, denegando sin excepciones su continuidad en el servicio".

"Ese plan -- continuó -- dispone que la autorización de la prórroga será excepcional y que ésta procederá cuando concurran necesidades asistenciales plenamente probadas". Algo que, según añadió Sáenz de Buruaga, "no se producirá nunca, porque el plan concluye que no hay necesidad de profesionales en Cantabria y no existe, por lo tanto, necesidad de prolongar la permanencia en el servicio activo a los profesionales que lo soliciten".

La parlamentaria regional del PP manifestó su "seria preocupación" por "las consecuencias de esta decisión, de esta falta de rigor y de planificación que una política de jubilaciones, absolutamente rígida, indiscriminada y carente de sentido común, va a tener sobre la sostenibilidad y calidad de nuestro sistema sanitario".

En opinión de Sáenz de Buruaga, esta medida se pondrá en marcha "sin tener en cuenta la insuficiencia de efectivos en nuestras plantillas y la carencia de sustitutos en determinadas especialidades". Pero además, "sin tener en cuenta la excelencia profesional y el valor añadido que muchos de estos profesionales reportan a nuestro sistema de salud".

"Se pondrá en marcha -- añadió -- en un momento que no puede ser ni más inadecuado ni más inoportuno, sin tener en cuenta además la dramática situación de nuestras listas de espera". En opinión de la diputada regional del PP, "hace falta ser inconsciente e irresponsable para prescindir de facultativos porque, según el Gobierno, no hay necesidades asistenciales plenamente probadas en Cantabria que aconsejen su continuidad".

María José Sáenz de Buruaga calificó la propuesta del PP como "razonable, razonada y absolutamente necesaria para frenar lo que amenaza con convertirse en un problema más para nuestro sistema sanitario público". Al respecto indicó que se debe aprender "del ejemplo de otras comunidades que lo están haciendo bien y de las que han sabido rectificar a tiempo".

Para concluir señaló que Cantabria debe "ordenar el proceso de renovación de plantillas de facultativos y el relevo generacional de forma progresiva, con moderación y prudencia, con flexibilidad y sentido común, atendiendo a criterios como la relevancia e insuficiencia de determinados especialistas, así como al adecuado dimensionamiento de las plantillas de los distintos centros y la situación de las listas de espera".