Partido Popular en Cantabria

El Partido Popular ha pedido hoy depurar responsabilidades políticas de una vez por todas después de la vacunación irregular de la madre de la directora médica de Atención Primaria y ha exigido la dimisión inmediata de la gerente de Atención Primaria, que vinculó su puesto a la suerte de la directora médica, y la dimisión del consejero de Sanidad por haber mentido con el fin de “tapar” estos hechos y porque se demuestra que en Cantabria no hay plan de vacunación, el descontrol es absoluto y no hay nadie competente al volante.

El portavoz de Sanidad de los populares, César Pascual, ha criticado hoy en rueda de prensa las contradicciones e inverosímiles explicaciones que se han venido dando por parte de la directora médica, de la gerente de Atención Primaria y del consejero para justificar esta vacunación irregular. “No hay razones, no hay criterios, no hay justificaciones para usar tu cargo privilegiando a tu gente, y no es de recibo y es inmoral avalarlo y justificarlo”, ha dicho.

Pascual ha señalado que si el consejero Miguel Rodríguez tuviera un mínimo de dignidad ya habría presentado su dimisión por la cadena de acontecimientos que día a día le ponen en evidencia. “Es cuestión de responsabilidad y ejemplaridad. Aunque ya quedó muy claro que él no es ejemplo de nada tras su paso por La Filmoteca”.

El diputado popular ha explicado que la vacunación contra el Covid-19 el pasado 12 de enero de la madre de la directora médica de Atención Primaria, hecho reconocido por la propia directora médica que presentó su dimisión y alegó se debió a que sobraban dosis, ha dejado en evidencia que tanto la gerente de Atención Primaria como el consejero de Sanidad no han dicho la verdad para ocultar irregularidades y falta de planificación en el proceso de vacunación.

Así, César Pascual ha dicho que existen razones más que suficientes para exigir el cese fulminante de la gerente de Atención Primaria, por no planificar y por mentir para justificar los hechos en un intento de salvar la cara.

“Si hubiera estado planificado como debiera esos hechos no hubieran ocurrido”, ha señalado, recordando que la propia gerente de Atención Primaria ha reconocido que el día 12 no se había dado instrucciones específicas a los centros sobre qué hacer si sobraban dosis, cuando días antes había afirmado en los medios de comunicación que las instrucciones se habían dado el día 8 e incluso que había una lista de espera.

“Aunque sobraran dosis y no hubiera instrucciones al respecto, el protocolo marca claramente que después de las residencias y de los sanitarios van los grandes dependientes en sus domicilios”, ha dicho Pascual, para quien es “intolerable” que no exista un plan operativo que desarrolle el Estrategia Nacional de Vacunación y que se traslade la responsabilidad al arbitrio de los profesionales de los centros de salud, como ha ocurrido en Nueva Montaña, en Ampuero o en Santoña.

E, igualmente, según César Pascual, el consejero ha mentido para ocultar estas irregularidades al señalar, a preguntas de la prensa y con gran crispación, que fue un centro de salud el que vacunó a la madre de la directora médica de Atención Primaria, cuando los hechos ocurrieron en el centro coordinador que tiene el 061 en el Centro de Salud de Nueva Montaña, que fue desde donde decidieron llamar a Gerencia a ver qué hacían con la dosis.

“El consejero sabe muy bien que el 061 no vacuna a ninguna señora, a nadie. Además, no se previó el sobrante de dosis y en ningún caso esas dosis se ofertaron al centro de salud para que ellos las usaran con pacientes del propio centro. Y es que ni esa persona está adscrita al cupo de pacientes de Nueva Montaña ni desde el centro de salud se le había llamado para ser vacunada”, ha abundado.

El portavoz de Sanidad de los populares ha subrayado que los ciudadanos se merecen todas las explicaciones acerca de la inexplicable actitud del consejero de sanidad y la gerente de Atención Primaria y de estos graves hechos y, por eso, el Grupo Popular ha registrado una batería de diez preguntas al consejero para su respuesta ante el Pleno del Parlamento y que con luz y taquígrafos se explique la verdad de lo sucedido, y también la comparecencia en la Cámara de la gerente y la directora médica de Atención Primaria.

A juicio de Pascual, la consejería de Sanidad “es una mina de situaciones y actuaciones que demuestran incompetencia, falta de gestión, irresponsabilidad” y, por eso, ha opinado que el presidente Miguel Ángel Revilla no puede refugiarse en un silencio cómplice ni en unas declaraciones extemporáneas, sino que debe actuar y hacerlo con contundencia exigiendo que definitivamente se actúe en la consejería con buena gestión, transparencia y rendición de cuentas.

Se adjuntan audios, fotografías e iniciativas registradas por el Grupo Popular